Ya se cuentan las horas para que este sábado La Esfera de Las Vegas vibre con la función de Riyadh Season Noche UFC, donde la mexicana Alexa Grasso enfrente a la Kirguesa Valentina Shevchenko en lo que podría ser el último capítulo de la trilogía entre estas dos aguerridas peleadoras.
Tras dos combates donde la mexicana ha salido triunfadora, la kirguesa se ha preparado de forma exhaustiva con su coach Pavel Fedorov, primero en Tailandia y finalmente con un campamento en El Paso, Texas.
“Fuimos como de cuatro a seis semanas a El Paso, con el maestro Pavel que tiene un amigo, Armando y en su academia entrenamos con todo, con sparrings de El Paso y de Ciudad Juárez que estaban cruzando la frontera para entrenar conmigo, entonces toda esta experiencia y la cultura me cargó de mucha fuerza y me preparó muy bien para la pelea”, mencionó Shevchenko.
Mientras tanto Alexa tuvo su campanento itinerante entre Puebla y su natal Guadalajara, ahí junto a su tío Pacho Grasso pulió detalles para mejorar su performance en este combate.
“Definitivamente mi boxeo es algo que he estado puliendo y obviamente todo lo demás está ahí y sé perfectamente lo que tengo que hacer, ir para adelante y ser yo y dejar ir mi striking”, aseguró la jalisciense.
A diferencia de Grasso, Shevchenko está segura que no es cuestión de “solamente ajustar alguna técnica, en MMA es algo de naturaleza, de sentir la pelea es lo más importante, no es ajustar solamente una técnica porque puedes confiar en tu boxeo y de repente de una patada ya sales y terminó todo, entonces es así, trabajar en todos tu lados fuertes y empujar hasta el final”.
La primera ocasión en medirse fue el 4 de marzo del 2023, ahí Shevchenko perdió el combate, y de paso el cetro ante la mexicana por sumisión, la victoria fue una verdadera sorpresa pues Grasso acabó con la hegemonía de siete defensas exitosas por parte de la peleadora de origen kirguiso…
La polémica llegó en la segunda edición de esta rivalidad, Alexa realizó su primera defensa de campeonato, luego de cinco rounds los jueces determinaron un empate al registrar en las tarjetas 48-47, 47-48 y 47-47, permitiéndole retener el título a la mexicana.
