Esta investigación puede revolucionar la forma para abordar estos problemas de salud
El envejecimiento celular es un proceso biológico inevitable, identificado como un factor clave en la aparición y progresión de enfermedades graves como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares (ECV).
Investigaciones recientes sugieren, al comprender y regular este proceso, que se pueden abrir nuevas vías para tratar y prevenir estas condiciones, que siguen siendo las principales causas de mortalidad a nivel mundial.
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Investigadores del Hospital Houston Methodist, identificaron un vínculo entre el envejecimiento celular y el desarrollo de estas enfermedades, pudiendo revolucionar la forma para abordar estos problemas de salud. La investigación, apunta a la intervención en los procesos de envejecimiento celular y podría retrasar o incluso revertir la progresión de estas afecciones.
Entre los factores de riesgo comunes para el cáncer y las enfermedades cardiovasculares, se encuentran el tabaquismo, la obesidad, la edad avanzada, la diabetes y los antecedentes familiares. Estas condiciones suelen coexistir en los mismos individuos, y la senescencia, un proceso de envejecimiento biológico, es un denominador frecuente en la progresión de ambas.
Según estudios recientes consultados, este envejecimiento está relacionado con el aumento en el riesgo de desarrollar cáncer y enfermedades cardiovasculares, reforzando la necesidad de intervenir terapéuticamente en la regulación de la senescencia.
Senescencia replicativa
La senescencia replicativa, caracterizada por el acortamiento de los telómeros, ocurre cuando las células alcanzan el final de su capacidad replicativa, deteniendo su crecimiento. A pesar de la detención, las células senescentes pueden seguir activas metabólicamente y secretar sustancias: citoquinas y especies reactivas de oxígeno (ROS, por sus siglas en inglés).
Este fenómeno, conocido como fenotipo secretor asociado a la senescencia (SASP, por sus siglas en inglés), fue identificado por tener un posible vínculo en la conexión entre el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.
Por otro lado, en un artículo publicado en la revista Frontiers in Cardiovascular Medicine en 2021, la doctora Nhat-Tu Le, del Hospital Houston Methodist, detalló cómo el SASP promueve la progresión de las enfermedades cardiovasculares y también está implicado en la tumorigénesis.
La doctora sugirió que la regulación del SASP puede ser clave para mitigar el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y otras condiciones relacionadas con el envejecimiento.
