El constante uso de las redes sociales para ver videos cortos podría tener repercusiones en la salud de las personas
Saltar de un vídeo a otro para combatir el aburrimiento y visualizar unos pocos segundos suele tener el efecto contrario: es más aburrido y hace que las personas se sientan más insatisfechas y menos interesadas por el contenido, según un estudio publicado por la Asociación Americana de Psicología.
El estudio se llevó a cabo con siete experimentos en los que participaron más de 1.200 participantes de Estados Unidos y universitarios de la Universidad de Toronto, Canadá.
¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA
En los experimentos, los participantes pasaron de un vídeo en línea a otro cuando estaban aburridos, pensando que se sentirían menos aburridos cambiando de vídeo en lugar de verlo entero.
Sin embargo, el estudio descubrió que el cambio digital -ver breves fragmentos de vídeos o avanzar rápidamente por ellos- en realidad hacía que la gente se aburriera más.
Los resultados del estudio se han publicado este lunes en la revista ‘Journal of Experimental Psychology: General’.
“Si la gente quiere disfrutar más de la experiencia de ver vídeos, puede intentar concentrarse en el contenido y reducir al mínimo el cambio digital porque al igual que pagar por una experiencia más inmersiva en una sala de cine, se disfruta más sumergiéndose en los vídeos en lugar de saltarlos”, afirma Katy Tam, autora principal e investigadora de la Universidad de Toronto.
Remedios contra el aburrimiento
Ver vídeos cortos en YouTube, TikTok, Facebook u otras plataformas de medios de comunicación en línea es un pasatiempo común para las personas que tienen teléfonos inteligentes. De hecho, es un remedio contra el aburrimiento, o eso creen.
Y es que, aunque las personas suelen recurrir al teléfono móvil mientras esperan en una cola o van en ascensor, investigaciones previas han descubierto que ese hábito aumenta el aburrimiento y evita que disfrutemos de muchas situaciones sociales.
Incluso, según han descubierto estudios anteriores, la gente puede hacer daño a otros por placer, comprar impulsivamente, darse descargas eléctricas, respaldar orientaciones políticas extremas o adoptar comportamientos laborales contraproducentes. Cualquier cosa para no aburrirse.
Para determinar hasta qué punto hacer scroll en vídeos en línea sin terminar de verlos es un método útil para combatir el aburrimiento, los investigadores hicieron un experimento en dos fases. En la primera, los participantes vieron un vídeo de YouTube de diez minutos sin tener la opción de avanzarlo o pasarlo.
En la segunda, los participantes podían pasar libremente por siete vídeos de cinco minutos en 10 minutos.
Los participantes dijeron sentirse menos aburridos cuando veían un único vídeo y consideraron que la experiencia visual era más satisfactoria, atractiva y significativa que cuando cambiaban de un vídeo a otro.
Los resultados fueron similares en otro experimento en el que los participantes veían un vídeo de 10 minutos en un segmento, pero podían avanzar o retroceder por un vídeo de 50 minutos durante 10 minutos en otro segmento.
“La conmutación digital puede hacer que el contenido de los vídeos en línea parezca carecer de sentido, porque la gente no tiene tiempo de comprometerse con el contenido o comprenderlo”, afirma Tam.
El cambio digital puede ser una fuente relacionada de aburrimiento, que podría tener consecuencias negativas para la salud mental, ya que el aburrimiento crónico está relacionado con síntomas depresivos, ansiedad, agresividad sádica y asunción de riesgos.