Sin aclararse tragedia del Rich, Enrique Galindo se esconde en Europa

La muerte de dos jóvenes y dieciséis heridos desata luto, dolor y enojo en San Luis Potosí; la sociedad exige justicia

La tragedia ocurrida el pasado 7 de junio, que resultó en la muerte de dos jóvenes y dieciséis heridos afuera del antro Rich, ha sacudido profundamente a la capital potosina.
La conmoción se intensificó ante la inminente presentación del cantante Kevin Moreno, y ahora la ciudad está en luto, sumida en dolor y enojo por las evidentes omisiones de la autoridad municipal, que toleró la operación irregular del establecimiento. La sociedad exige justicia para las víctimas de este trágico suceso.

Las responsabilidades de esta tragedia señalan a varios directores del ayuntamiento potosino, así como a la alcaldesa interina Alexandra Cid y al alcalde con licencia Enrique Galindo. Por acción u omisión, se permitió que una red de corrupción penetrara profundamente en la administración municipal, ignorando leyes y reglas a cambio de compensaciones económicas que se presume fueron sustanciales.

Muchas familias afligidas por esta desdicha creen que la tragedia podría haberse evitado si las autoridades hubieran actuado con apego al marco legal, en lugar de buscar beneficios ilícitos.

Ahora, con la Fiscalía General del Estado comenzando a citar a los involucrados y posiblemente emitiendo órdenes de aprehensión, la responsabilidad parece estar evadiéndose.

El alcalde reelecto Enrique Galindo Ceballos ha prolongado su licencia, aparentemente para evitar enfrentar su responsabilidad y proteger a sus funcionarios.

Los compromisos que hizo durante su campaña han quedado sin cumplir, y su falta de voluntad para enfrentar esta tragedia generada durante su administración ha dejado a la ciudad sin respuestas.

Se presume que Galindo está actualmente en Europa, disfrutando de una vida cosmopolita como lo hizo en varias ocasiones durante su primer periodo, ganándose el mote de “alcalde viajero”.

Mientras tanto, la ausencia de su “Polisía” se hizo evidente nuevamente en el barrio de San Miguelito, donde una anciana fue asaltada y golpeada por un par de rufianes en moto, exacerbando aún más la indignación de la ciudadanía.

Este trágico evento y la aparente evasión de responsabilidades por parte de las autoridades han dejado una marca imborrable en San Luis Potosí, que clama por justicia y por un gobierno que realmente proteja a su población.