Dio instrucciones a la abogada de la institución Urenda Navarro para ingresar a la fuerza y tratar de recuperar las instalaciones
Por instrucciones del rector de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), Alejandro Zermeño Guerra, la exdefensora de los Derechos Universitarios y ahora abogada general, Urenda Navarro Sánchez ingresó a la fuerza y amedrentando a los estudiantes, para recuperar el edificio de la Facultad del Hábitat, el cual estaba desde el pasado 6 de junio tomado.
De acuerdo a los estudiantes, primero un grupo de personas de seguridad universitaria, vestidos de civiles y sin identificarse, trataron de ingresar a la fuerza a la Facultad del Hábitat, las cuales están tomadas en protesta por la reelección de la directora Rosa María Reyes Moreno, debido a las pésimas condiciones en que se encuentran las instalaciones y otras irregularidades.
Los estudiantes tomaron las instalaciones desde la semana pasada, por ello la tarde de este martes, Urenda Navarro, se acompañó del notario Alfonso Leal y de personal del departamento de Seguridad y Resguardo con el fin de recuperarlas, señalándoles que tenían derecho a la manifestación, pero no a la toma de los edificios y hasta se les fincarían responsabilidades si encontraban irregularidades.
Los estudiantes lamentaron que a las afueras de la institución educativa hasta hubiera patrullas de la Policía Municipal intentando acabar con su protesta, misma que aseguran es legítima por las irregularidades dentro de la elección de la directora, pues no podía ser parte de la terna porque incumplía los requisitos necesarios de la convocatoria.
En un vídeo difundido por los propios estudiantes, se puede escuchar como la ex defensora de los derechos universitarios donde les informa a los jóvenes que va acompañada por el notario y van a recuperar los espacios y resguardarlos, sin limitar su derecho a la propuesta, por lo que se dejaran todas las mantas y pancartas.
Después le señala al notario que inicie con el proceso y si hay cosas que consignar que se haga de forma pacífica, ordenada, respetando su derecho a la protesta, pero ponderando el derecho de otras personas al acceso y uso de las instalaciones.
