En las últimas 24 horas, Ryan García, el controvertido boxeador de 25 años, fue arrestado por supuestamente causar daños valorados en 15 mil dólares a habitaciones del hotel Waldorf Astoria en Beverly Hills. El incidente ocurrió el sábado por la noche en Los Ángeles y resultó en una acusación de delito grave de vandalismo.
Según el medio TMZ, García estaba “aparentemente bajo la influencia del alcohol y/o drogas” durante el incidente, aunque cooperó con las autoridades en el momento de su arresto.
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Posteriormente, surgieron informes el domingo que indicaban que el boxeador ya había sido liberado de la cárcel y trasladado al hospital para evaluación y tratamiento. A pesar de estos informes, García recurrió a la red social X (anteriormente conocida como Twitter) el domingo para iniciar una tendencia bajo el lema ‘Free Ryan’, buscando apoyo para su liberación. En su publicación, García también solicitó oraciones de sus seguidores: “Guerreros de oración – Por favor, necesito oraciones – Muchas oraciones – Las oraciones pueden mover montañas – señor Jesús Sálvame”.
Además, García comparó su situación con la de figuras públicas como Donald Trump y Britney Spears, escribiendo: “Es curioso que tanto Trump como yo estemos en la cárcel.
No sé si está en la cárcel, pero sé que fue condenado. Esto apesta, pero amo a Jesús, estaré bien”.
En otra publicación, expresó: “Me siento como Ryan Spears. También conocido como Britney Spears. Esto apesta. Nunca lastimé a nadie. Solo amé. Todos oraron por las personas. Y trato de hacer un cambio en este mundo cruel. Te amo Cristo Jesús Amén”.
Este incidente se suma a una serie de comportamientos erráticos por parte de García, quien previamente había dado positivo por la sustancia prohibida Ostarine tras su sorpresiva victoria sobre Devin Haney en abril, una pelea en la que superó el peso límite por casi cuatro libras.
La muestra B también resultó positiva, lo que ha generado más dudas sobre su estabilidad mental y su futuro en el boxeo.
