Barby Juárez explicó que ser madre la motivó a ir en busca de cumplir su sueño en el mundo del pugilismo

Mariana «Barby» Juárez forma parte del universo de 17 millones 370 mil 122 mujeres que son madres y trabajan en México, esto de acuerdo al último reporte del INEGI (cuarto trimestre del 2023).

Sin embargo, llegar a ese sector representó para ella un gran reto, máxime a que se trataba de abrirse camino y vivir del boxeo, una disciplina dominada por hombres durante muchos años.

Y no solo eso, sino que la pugilista también es parte de ese grupo que refiere que tres de cada diez mujeres en nuestro país también son jefas de hogar (11.5 millones), lo que magnifica la responsabilidad de estar al frente de una familia, de cubrir necesidades y sin saber en su momento si el deporte de los puños iba a alcanzar para salir adelante.

Pero lo que algunos pudieran ver como una limitante, la ‘Barby’ lo tomó como una motivación, ya que la llegada de su hija se convirtió en un impulso para seguir con la meta fija de ir por su sueño, aunque es cierto y ella lo reconoce, en el camino existieron momentos de incertidumbre que la hicieron dudar de que algún día pudiera vivir del boxeo ante la desigualdad de género.

La boxeadora mexicana, que llegó a conquistar dos campeonatos mundiales en dos divisiones distintas (peso mosca del CMB y peso gallo del CMB), explicó que muchas veces llegó a toparse con discriminación, aunque por raro que parezca, ésta llegó por parte de las mujeres que estaban involucradas en el pugilismo, las cuales la minimizaban una vez que se convirtió en madre.

La ‘Barby’ Juárez reconoció que fue complicado abrirse camino como mujer en el pugilismo, poniendo el abuso de confianza como algo que tuvo que vivir, ya que uno de los promotores con los que trabajó mucho tiempo, la robó con ganancias de sus peleas, hecho que lamenta porque era dinero producto de su trabajo y con el que tenía que sostener un hogar.