(Guglielmi G. Nature 2024 may; doi.org/10.1038/d41586-024-01259-2)
Los científicos identificaron que células cerebrales regulan la inflamación. El cerebro tiene parte importante en el sistema inmunológico, con balance delicado entre señales moleculares y proceso inflamatorio, hallazgo que abre oportunidad de tratamiento contra enfermedades autoinmunes.
Trabajos previos demostraron que el nervio vago con red amplia de fibras nerviosas, une al cerebro con el cuerpo e influye protagónicamente en la respuesta inmune. Jao Jin, neuroinmunólogo de los Institutos Nacionales de Alergia y Enfermedades Infecciosas en Bethesda, Maryland, monitorizó la actividad de células cerebrales posterior a inyectar compuestos bacterianos en el ratón para disparar inflamación, lo que incrementó 300% las moléculas inflamatorias.
Experimentos novedosos identificaron que hay por lo menos dos grupos de neuronas, unas que promueven el fenómeno inflamatorio y otras que disminuyen señales de inflamación.
La participación cerebral y neuronal, permiten sostener bases de manutención de proceso inflamatorio y también explican en gran medida las manifestaciones de la COVID prolongada.
Recomendación de detección de cáncer de mama a los 40 años
(Rabin RC. New York Times)
De acuerdo al aumento de las tasas de cáncer de mama en mujeres jóvenes, un grupo de expertos recomendó mamografías periódicas a los 40 años, en contra de lo previamente aceptado de que la mayoría de las mujeres lo hicieren hasta los 50 años.
El Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE. UU. concluyó la recomendación el año pasado, con la emisión de consejos influyentes sobre salud preventiva. Las tasas de cáncer de mama entre las mujeres de 40 años están en aumento, al elevarse 2 por ciento al año entre 2015 y 2019, dijo John Wong, vicepresidente del grupo de trabajo. El panel sigue recomendando control cada dos años para las mujeres con riesgo promedio de cáncer de mama.
“Hay pruebas claras de que empezar a hacerse pruebas cada dos años a partir de los 40 aporta suficientes beneficios como para recomendarlas a todas las mujeres del país, con el fin de ayudarlas a vivir más tiempo y a tener una mejor calidad de vida”, dijo Wong, médico de atención primaria del Centro Médico Tufts y director de investigación de eficacia comparativa del Instituto de Ciencia Translasional de la Clínica Tufts.
Las aseguradoras no están obligadas a ofrecer cobertura completa de pruebas adicionales a mujeres, cuyos cánceres pueden pasar desapercibidos solo con mamografías y que, la mitad de las mujeres mayores de 40 años pertenecen a esta categoría.
En los últimos años, la ley ha exigido a más proveedores de mamografías que informen a las mujeres cuando tienen tejido mamario denso y que les indiquen que la mamografía puede ser una herramienta de diagnóstico insuficiente para ellas.
La buena condición física puede estar relacionada con mejor salud mental
(Richtel M. New York Times)
Mejor rendimiento en las actividades cardiovasculares, la fuerza y la resistencia muscular, se asocian a mejor protección contra los trastornos mentales.
Una buena condición física en los niños y adolescentes puede protegerlos contra el desarrollo de síntomas depresivos, ansiedad y trastorno por déficit de atención con hiperactividad, de acuerdo a estudio publicado en JAMA Pediatrics.
El mejor rendimiento en las actividades cardiovasculares, la fuerza y la resistencia muscular se asocian a mayor protección contra estos trastornos mentales. Tal parece que esta relación es “dosis-dependiente”.
Estos hallazgos se producen en medio de un aumento de los diagnósticos de salud mental entre niños y adolescentes, tanto en Estados Unidos como en el extranjero, lo que ha impulsado iniciativas para comprender y frenar el problema.
La mejoría en el rendimiento en actividades como carreras de 800 metros, flexiones de brazos y saltos se relacionó con menor riesgo de padecer trastornos mentales.
Nuevo estudio, realizado por investigadores de Taiwán, comparó la información de dos grandes conjuntos de datos: las Pruebas Nacionales de Aptitud Física de los Estudiantes de Taiwán, que miden el rendimiento físico de los estudiantes en las escuelas, y las Bases de Datos Nacionales de Investigación sobre Seguros, que registran las reclamaciones médicas, los diagnósticos, las recetas y otros datos de salud. Los investigadores no tuvieron acceso a los nombres de los estudiantes, pero pudieron utilizar los datos anónimos para comparar los resultados de aptitud física y salud mental de los estudiantes.
El riesgo de padecer trastornos mentales se ponderó en función de tres parámetros de la condición física: la aptitud cardiovascular, medida por el tiempo del estudiante en una carrera de 800 metros, la resistencia muscular, indicada por el número de abdominales realizados y la potencia muscular, medida por el salto de longitud.
La mejora del rendimiento en cada actividad se relacionó con menor riesgo de trastornos mentales; la disminución de 30 segundos en el tiempo de 800 metros se asoció, en las chicas, a menor riesgo de ansiedad, depresión y trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), en los chicos, a menor ansiedad. Lo mismo ocurrió con el aumento en la capacidad para realizar abdominales.
La salud mental puede ser “la crisis de salud pública más importante de nuestro tiempo”; de 2001 a 2019, la tasa de suicidios entre los estadounidenses de 10 a 19 años aumentó 40 por ciento y las visitas a urgencias relacionadas con autolesiones aumentaron 88%. El ejercicio potencialmente es una terapia alcanzable, accesible, universal….
