El ejército nigeriano liberará a más de 300 personas sospechosas de formar parte de la insurgencia islamista de Boko Haram después de que un tribunal dictaminara que no había pruebas de que hubieran cometido delito alguno, dijo el jueves un portavoz de Defensa.
En 2009, el grupo yihadista Boko Haram lanzó una insurgencia con la que pretendía derrocar al Gobierno e instaurar un Estado islámico.
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La insurgencia ha causado decenas de miles de muertos y ha obligado a más de dos millones de personas a huir de sus hogares, generando una de las peores crisis humanitarias del mundo.
Las 313 personas, sospechosas de pertenecer a Boko Haram, serán puestas en libertad por decisión de un tribunal del estado nororiental de Borno, corazón de la insurgencia, según el portavoz de Defensa, el general de división Edward Buba.
Los casos fueron instruidos por el Departamento de la Fiscalía, dependiente del Ministerio Federal de Justicia, y las personas serán entregadas al Gobierno del estado de Borno para que adopte las medidas oportunas, añadió.