No es un juego que se vea reflejado en el standing, pero sí que significa una gran experiencia para los New York Yankees el venir a México después de 56 años desde su única visita.
Así como lo fue Mickey Mantle en 1968, Giancarlo Stanton llega como la figura de los bombarderos del Bronx: con cinco llamados al All-Star y el MVP de la Liga Nacional de 2017, muchos aficionados querrán ver lo que el bateador designado puede hacer en el estadio Alfredo Harp Helú… incluso él tenía altas expectativas con respecto a lo que se podía encontrar en este viaje. Ni siquiera quiso tener un anticipo de lo que sería el parque de pelota que se iba a encontrar aquí. Sorprenderse como en los viejos tiempos, antes de la era digital.
“Es un estadio excelente. No quería ver fotos, ni entrar en Internet. Porque la verdad quería tener la oportunidad de caminar, de experimentarlo por mí mismo y la verdad es que definitivamente lo que he visto es muy agradable, un estadio muy bien hecho”, compartió el pelotero antes del arranque de la serie en la Ciudad de México.
Aceptó al instante
Son pocos los peloteros de talla superestrella que pudieron venir a esta serie, pero la calidad de los Yankees, y la propia experiencia, hace que todo tenga el interés suficiente para formar parte de este capítulo histórico para el beisbol mexicano.
Stanton no quiso quedarse fuera de una oportunidad única en su vida, por lo que tan pronto le dijeron que podía formar parte de este roster o declinarlo, optó por acertar el viaje.
