Aunque parezca una actividad común y que no requiere gran ciencia, la realidad es que debemos prestar atención a las posturas con las que dormimos, puesto que esto nos proporcionará un mejor descanso y la ausencia de molestias o dolores, de acuerdo con la revista UNAM Global.
Pepe Herrera y Alberto Resendiz autores del artículo ¿Cuál es la mejor posición para dormir y por qué? en dicha revista, señalan que profesionales especializados, como el Dr. Juan Carlos del Razo Becerril de la FES Zaragoza, resaltan la importancia de las posturas saludables a la hora de dormir.
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Dormir boca arriba
Esta es la postura para dormir más común, aunque no es la mejor. A pesar de ello, hay varias ventajas como que la columna se alinee y, por tanto, la tensión entre los discos vertebrales disminuya, ayuda a mantener a los órganos internos alineados, previene el dolor de cuello y espalda.
No obstante, esta posición tiende a ser contraindicada para aquellas personas que padecen de apnea de sueño ya que “cuando dormimos boca arriba entramos en un sueño profundo y nos relajamos muscularmente. Dentro de esos músculos que se relajan están la faringe y la laringe, que llevan aire hacia las vías respiratorias. Para las personas que padecen apnea de sueño, la relajación de ambos músculos les juega en contra”.
Dormir boca abajo
Esta posición es la menos usual y manifestó que si “bien los discos vertebrales se alinean, los de la región cervical y del cuello se ven afectados generando dificultades importantes como dolor en esta zona o problemas cervicales serios. Por otro lado, también se ve afectada la capacidad de respirar, ya que se comprime el tórax y, por ende, el paso de aire es reducido”.
Dormir de lado
“Es la mejor forma de dormir y más si es del lado izquierdo”, indicó el Dr. Juan Carlos del Razo Becerril, quien destacó que dentro de esta posición otorga diversas ventajas entre las que se encuentran evitar los dolores cervicales, de espalda, mejorar la respiración, disminuir los ronquidos y reducir el reflujo gastroesofágico.