(VÍDEO) Denuncian maltrato a pacientes en Clínica Mental Dina Belanger, A.C.

Vecinos deL Barrio de Santiago se alzan contra presunto abuso en el tratamiento de jóvenes pacientes.

En el barrio de Santiago, un clamor de indignación ha surgido ante las denuncias de maltrato en la Clínica Mental Dina Belanger, A.C., ubicada en la calle Aquiles Serdán número 825. Los residentes han levantado la voz ante lo que describen como un patrón preocupante de abuso hacia los pacientes, particularmente jóvenes.

Según relatos de testigos presenciales, dos adolescentes, una de 16 y otra de 13 años, originarias de estados vecinos, supuestamente escaparon de la institución la noche del lunes pasado. Sin embargo, su fuga fue interrumpida por personal de la clínica, desatando un altercado captado por una cámara de seguridad local.

El vídeo muestra cómo las jóvenes son sometidas por individuos no identificados. Una de ellas logra huir, pero la otra es brutalmente retenida y, en un momento crítico, arrojada violentamente al suelo, quedando visiblemente afectada por el impacto. En su desesperación, la adolescente grita su rechazo a regresar a la institución.

La reacción de los vecinos no se hizo esperar. Ante el escándalo, acudieron en defensa de las jóvenes, confrontando a una mujer que se identificó como psicóloga o psiquiatra de la clínica. Los residentes reprocharon el presunto maltrato que los pacientes habrían sufrido en repetidas ocasiones, incluso mencionando casos de ataduras con cadenas.

La presunta profesional de la salud, en un gesto que ha levantado aún más suspicacias, habría alegado tener influencias políticas, sugiriendo que estaba protegida por un funcionario de la Guardia Civil. Esta afirmación solo ha exacerbado la indignación de los vecinos, quienes exigen una investigación exhaustiva sobre las prácticas dentro de la institución.

La comunidad de Santiago, consternada por lo ocurrido, clama por justicia y medidas urgentes para salvaguardar la integridad de los pacientes de la Clínica Mental Dina Belanger, A.C., y garantizar que ningún individuo sea sometido a abusos bajo el cuidado de una institución que debería velar por su bienestar.

A través de su cuenta de X, la usuario Bob Feminista, expone el caso, en un hilo:

Imagina que vas caminando por la calle un día normal en San Luis Potosí y de repente ves corriendo a dos chicas siendo perseguidas por dos hombres en bicicleta, crees que quieren asaltarlas y no sabes qué hacer, pero ellos te dicen que «están locas» y que se escaparon de una Clínica de Salud Mental.

Esto llama la atención de la gente que vive en esa zona y salen de sus casas a intentar ayudar. Las miran, platican con ellas, les hacen preguntas y las chicas mencionan que no es la primera vez que han intentado escapar del lugar donde las tienen encerradas, pero que en una de esas ocasiones que escaparon y pudieron alcanzar a llegar a la fiscalía no les hicieron caso, porque la dueña de esa Clínica tiene contactos en fiscalía.

Te dicen que ninguna de ellas es de San Luis Potosí, una es de Saltillo y recuerda haber sido llevada a ese lugar por la fuerza y la otra es de Guanajuato, y no recuerda cómo llegó ahí.

Ambas tienen 13 y 17 años. La chica de 13 años lleva medio año sin tener contacto con sus familiares.

También te dicen que ese sitio hay más mujeres que curiosamente muchas de ellas tampoco son potosinas y algunas son incluso de otros países. Ambas están muy asustadas, y presentan signos de violencia física, como marcas de cadenas en las muñecas, cuello y heridas en la espalda.

Los hombres insisten en llevárselas pero alguien intenta mejor llamar a la policía para aclarar la situación. Los vecinos preocupados, ya amontonados en la calle ven todo muy sospechoso y llega una camioneta de donde se baja la supuesta encargada de la clínica sin mostrar ningún tipo de identificación, con actitud prepotente a regañar a las chicas con lenguaje despectivo y diciéndole a l@s vecin@s que no deberían creerles. Intenta llevárselas pero l@s vecin@s lo impiden.

Uno de los hombres que trabajan ahí, al verse acorralado, admite que en ese lugar sí maltratan físicamente a las pacientes. Y para esto la encargada amenaza con que hagan lo que hagan, la fiscalía del Estado de San Luis Potosí ya están coludidos con esta clínica y que no pueden hacerles nada. Que no es la primera vez que se escapan y quesiempre se las devuelven.

La señora llama por teléfono en altavoz a un «comandante» para decirle que estaba sucediendo la «misma situación de siempre» (refiriéndose a las chicas que escaparon) El «comandante» le dice que enviará a unas unidades para que puedan llevárselas.

Los vecinos quedan sorprendidos pero se niegan a irse y dejar a las chicas desamparadas. La señora se retira en su camioneta. Después llega otra chica muy joven, diciendo ser la psicóloga de la clínica (quien después se confirma que es hija de la encargada) a regañar de nuevo a las chicas. Tampoco mostrando nunca identificación y negándose a proporcionar su cédula profesional.

Fue cuestionada y tampoco sabía decir un diagnóstico certero sobre lo que supuestamente les sucedía a las niñas, sólo mostró un documento de Word en el celular y las llamaba «loquitas».

E insistió mucho en que si no le creen, que se suban a su camioneta y la acompañen para ir a ver el diagnóstico de las niñas. L@s vecin@s se negaron y continuaron haciendo barrera para respaldar a las chicas.

Llegan patrullas de la guardia civil, y les explican la situación. El encargado de ellos se fue con un grupo de vecin@s hacia donde está la clínica, e inmediatamente en el interior de la clínica apagan las luces y cierran puertas y ventanas, negándose a dar información.

¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA