Anthony Joshua registró su cuarta victoria al hilo y la 28 de su carrera profesional, luego de noquear en el segundo asalto a Francis Ngannou, en un choque que causó suma expectativa, pero que el británico definió rápido.
El combate se realizó en la Kingdom Arena de Riyadh en Arabia Saudita, donde han sido cuatro de las últimas nueve presentaciones de Joshua. Todo mundo esperaba ver un pleito que emocionante y en el que Ngannou pudiera sacar la victoria.
Hay que recordar que el camerunés, un excampeón de artes marciales mixtas en UFC, se enfrentó en octubre de 2023 a Tyson Fury, un duelo en el que muchos vieron ganar al africano y que, por ende, pensaban que podía poner en predicamentos a Joshua, pero eso nunca pasó.
El combate fue pactado a 10 asaltos, pero Joshua solo necesitó de dos para mandar el mensaje de que está de vuelta y con ansias de aspirar a recuperar el fajín de los pesados que perdió ante el ucraniano Oleksandr Usyk.
Si no fuera así, su compatriota Fury ostenta el fajín del Consejo Mundial de Boxeo. Usyk actualmente es el flamante monarca de la división de la Asociación, Federación y Organización Mundial de Boxeo.
El pleito de este viernes en Medio Oriente era dominado por Joshua. Restaban pocos minutos para terminar el segundo capítulo cuando mandó a la lona a Ngannou con un volado de derecha. El africano recibió la cuenta de protección, se recuperó, pero todo fue inútil, ya que el europeo volvió a lanzar su puño derecho sobre el rostro de su rival, quien cayó descompuesto y sin poder recuperar el sentido por algunos segundos.
