Después de casi diez años de trabajo arduo, dos acusaciones formales, la partida de un ejecutivo fundamental y enormes gastos, Apple habría tomado la decisión de abandonar su proyecto de desarrollo de un vehículo autónomo, conocido como Project Titan.
La decisión, que aún no ha sido oficialmente confirmada por Apple, fue filtrada por fuentes internas y posteriormente informada por Bloomberg. El repentino cierre del proyecto ha tomado por sorpresa a los cerca de 2 mil empleados vinculados, y algunos de ellos podrían enfrentar la posibilidad de ser despedidos.
Aquellos que logren permanecer en la empresa serán reasignados a proyectos de inteligencia artificial generativa de Apple. Iniciado en 2015, Project Titan era conocido por su objetivo de alcanzar la autonomía completa en la conducción, aunque recientes informes indicaban la necesidad de controles humanos.
El liderazgo del proyecto sufrió importantes cambios a lo largo de los años, y el proyecto enfrentó problemas legales significativos, incluido el robo de secretos comerciales por parte de empleados.
Tan solo en 2019, Apple recibió una patente para eliminar puntos ciegos en vehículos autónomos. El sector de los vehículos autónomos, en general, atraviesa un momento complicado, con fallos notables en otras empresas y una reevaluación del compromiso con esta tecnología.
A pesar de los esfuerzos y la inversión de gigantes tecnológicos, los coches completamente autónomos aún parecen ser una meta lejana.