La nutricionista Sara Abu Sabbah señala la importancia crucial de la masticación adecuada en el proceso digestivo, destacando que desde que el alimento entra en la boca hasta que alcanza el intestino delgado, transcurren entre 6 a 8 horas. Sin embargo, el tránsito al intestino grueso puede llevar hasta 36 horas adicionales, y en algunos casos, todo el proceso digestivo puede tardar entre 2 a 5 días.
Destaca que la calidad de la masticación es un factor determinante para una digestión eficiente, ya que, a través de ella, se parte físicamente el alimento y se mezcla con la saliva, que contiene enzimas digestivas. Abu Sabbah advierte que una masticación inadecuada puede resultar en una digestión ineficiente, generando malestar digestivo, gases e incluso estreñimiento.
Abu Sabbah recomienda contar las veces que se mastica cada bocado, citando estudios que sugieren masticar entre 30 y 35 veces por bocado. Explica que este hábito prolonga el tiempo de masticación, permitiendo que se activen señales desde el estómago hasta el cerebro para prepararse y reconocer la ingesta de alimentos, promoviendo así la sensación de saciedad.
La nutricionista advierte que tragar los alimentos sin masticar adecuadamente puede conducir a comer en exceso y contribuir al aumento de peso no deseado. Además, enfatiza la importancia de comer sentado y evitar estímulos estresantes para favorecer un proceso digestivo adecuado y la conexión mente-cuerpo durante la alimentación.
En relación con el aumento de peso, la nutricionista advierte que masticar mal puede contribuir a una ingesta calórica excesiva. Explica que, al no dar suficiente tiempo al cerebro para reconocer la ingesta de alimentos, se tiende a comer más de lo necesario, lo que lleva a un aumento de calorías y, eventualmente, de peso. Recomienda disfrutar de las comidas con calma y evitar el consumo rápido de alimentos para promover una alimentación saludable y controlar el peso corporal.
