Lewis Hamilton mantuvo su traspaso a Ferrari tan sigilosamente que ni siquiera se le mencionó a sus padres hasta el día que se hizo oficial.
El siete veces campeón mundial remeció a la Fórmula Uno cuando se anunció el 1 de febrero que se marchará a la escudería italiana el año próximo, pese a que había renovado su contrato con Mercedes el verano boreal pasado.
‘No se lo dije a nadie. No se lo conté ni a mis padres hasta el día del anuncio. Nadie sabía”, dijo Hamilton en un podcast de la BBC. “
“Fue algo personal. Al final de cuentas, tenía que decidir lo que era mejor para mí”, añadió.
Lo que trascendió posteriormente es que el acuerdo de dos años que firmó con Mercedes que se anunció en agosto era en realidad por un año y con un opción para un segundo, el cual Hamilton decidió no tomar.
Hamilton informó al jefe de Mercedes Toto Wolff sobre su decisión de irse a Ferrari un día antes durante un desayuno en la casa de Wolff
