El delantero peruano Paolo Guerrero denunció amenazas contra su madre, razón por la cual decidió no cumplir un reciente contrato
El renombrado futbolista peruano, Paolo Guerrero, ha tomado la decisión de abandonar su club en Perú debido a amenazas de extorsión y secuestro. Guerrero, reconocido como el goleador histórico de la Selección Nacional de Perú, había firmado contrato con el club César Vallejo, pero optó por no continuar debido a la preocupante situación.
En sus propias palabras, declaró: “Quiero pedir disculpas. Es una decisión que he tomado con mi familia de no llegar, de rescindir mi contrato por todas las amenazas que sigo recibiendo”.
El atacante internacional, quien reside en Brasil, reveló que las amenazas fueron dirigidas a su familia en Lima, a través de mensajes de WhatsApp. “No esperaba que pase esto”, lamentó Guerrero, destacando su preocupación por la seguridad de su familia, especialmente de sus tres hijos.
Las amenazas surgieron después de que el club anunciara públicamente el fichaje de Guerrero el 2 de febrero. Este incidente ha resaltado la preocupante situación de seguridad en Trujillo, la ciudad donde se encuentra el club César Vallejo, que actualmente enfrenta una emergencia por la violencia generada por bandas internacionales, como el “Tren de Aragua”.
A pesar de la gravedad de la situación, los directivos del club instaron a Guerrero a presentarse al entrenamiento el 17 de febrero en Trujillo. Guerrero, quien ha vivido en Brasil durante una década, expresó su sorpresa ante estas amenazas, describiendo la situación como algo nuevo y preocupante. “Yo sólo quiero jugar al fútbol”, afirmó.
Aunque las autoridades policiales de Trujillo no han recibido denuncias formales sobre las amenazas, la situación ha generado una gran preocupación en la comunidad futbolística y en la sociedad en general. El club César Vallejo había contratado a Guerrero con la esperanza de contar con su destacada participación.
