La presencia de Horner en el estreno en pista de un nuevo monoplaza de Red Bull Racing nunca habría llamado la atención de nadie, pero sus acciones han tomado otra consideración desde que el jefe del equipo de Milton Keynes se encuentra bajo una investigación independiente por presunto comportamiento indebido.
Esta investigación, que fue iniciada por la empresa Red Bull por fuera del equipo de F1 tras entrar en conocimiento de acusaciones contra Horner, las cuales aún no fueron comunicadas públicamente, llevo al británico a ser parte de una reunión el viernes que duró más de ocho horas con el abogado externo que lleva adelante el proceso.
Si bien Red Bull indicó inicialmente en un comunicado la semana pasada que esperaba que la investigación «se completará tan pronto como sea prácticamente posible», todo parece creer que el asunto se extenderá más allá de la presentación del nuevo coche que la escudería tiene prevista realizar este jueves 15 de febrero en su fábrica de Milton Keynes.
El hecho de que un evento de tal importancia para Red Bull se lleve a cabo mientras su jefe y CEO del equipo es el foco de una investigación tan seria, e iniciada por la propia compañía, hace pensar que la presencia de Horner el jueves no sería compatible con el momento actual.
