Trump promete eliminar restricciones a las armas impuestas por Biden si es reelegido

Al considerar que los propietarios de armas conservadores son fundamentales para sus posibilidades de reelección, Trump ha seguido cortejándolos agresivamente.

El expresidente Donald Trump, favorito republicano en la carrera presidencial de 2024, dijo que si es reelegido revertirá todas las restricciones a las armas promulgadas por Joe Biden.

En un discurso ante miles de simpatizantes en un acto organizado por la Asociación Nacional del Rifle (NRA), Trump prometió anular una norma que restringe la venta de ciertos accesorios para armas y otras restricciones puestas en marcha por el Gobierno de Biden.

Todos y cada uno de los ataques de Biden a los propietarios y fabricantes de armas serán rescindidos en mi primera semana de vuelta al cargo, quizá en mi primer día», dijo Trump en un discurso ante miles de simpatizantes en la feria Great American Outdoor de Harrisburg, Pensilvania.

La NRA respaldó con entusiasmo a Trump durante la carrera de 2016 y a lo largo de su Gobierno, animándole mientras nombraba a tres jueces conservadores a la Corte Suprema y adoptaba una serie de medidas buscadas por el influyente lobby de las armas.

Estas incluyeron la designación de las tiendas de armas de fuego como negocios esenciales durante la pandemia de covid-19, lo que les permitió permanecer abiertas.

Al considerar que los propietarios de armas conservadores son fundamentales para sus posibilidades de reelección, Trump ha seguido cortejándolos agresivamente.

Dijo a la multitud el viernes que si es reelegido «nadie pondrá un dedo sobre sus armas de fuego» y se jactó de cómo resistió la presión para implementar restricciones a las armas durante su mandato en la Casa Blanca de 2017 a 2021.

Durante mis cuatro años no pasó nada, y hubo una gran presión sobre mí que tenía que ver con las armas. No hicimos nada, no cedimos», dijo Trump. Restricción a armas

El presidente Joe Biden dio un paso adelante en la regulación de armas en marzo de 2023. El mandatario firmó una orden ejecutiva que refuerza los controles de las ventas de armas de fuego.

La iniciativa pretende hacer más difícil que las pistolas y rifles terminen en manos de personas con problemas mentales, antecedentes penales o de abuso doméstico.

También busca hacer más sencillo para policías y jueces quitar el armamento a quien representa un peligro potencial para su comunidad.