Cuatro meses después de la aprobación de la inscripción por parte de la FIA, la candidatura del equipo fue rechazada por la F1 en un extenso comunicado emitido el miércoles.
El campeonato expuso varias razones por las que creía que no se podía aceptar la candidatura, que iban mucho más allá de los aspectos comerciales que la mayoría de los observadores esperaban que la F1 cubriera.
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Una de las principales afirmaciones era que la F1 consideraba que el equipo había mordido más de lo que podía masticar al planear una inscripción para 2025 con un coche construido según la normativa actual, y luego verse obligado a diseñar otro para las normas muy diferentes que entrarán en vigor en 2026.
La F1 señaló que “no creemos que haya base para que un nuevo solicitante sea admitido en 2025, dado que esto implicaría que un participante novato construyera dos coches completamente diferentes en sus dos primeros años de existencia”.
“El hecho de que el solicitante proponga hacerlo nos da motivos para cuestionar su comprensión del alcance del reto que supone”.
Andretti había indicado hasta ahora que todavía estaba listo para entrar en 2025 si el tiempo lo permitía, pero el equipo confirmó el viernes que internamente ya había cambiado su enfoque a un debut en 2026 dado el largo proceso de entrada.
