El Ferrari SF-24 se ha completado en el departamento de ensamblaje de Gestione Sportiva y, al parecer, la operación se ha sublimado con el ya habitual «fire-up», es decir, la primera puesta en marcha de la unidad de potencia para comprobar que el ensamblaje se ha realizado a la perfección, verificando las uniones de los distintos sistemas.
Ahora, el monoplaza rojo puede trasladarse al banco dinámico de Maranello, donde será instrumentado (se habla de más de 15 kg de sensores y cableado) para realizar una serie de pruebas muy importantes que precederán al debut en pista, fijado para el 13 de febrero en Fiorano, para el corto shakedown de 15 kilómetros que el reglamento de F1 permite a los equipos.
Charles Leclerc y Carlos Sainz sólo podrán dar cinco vueltas al circuito de casa (que en la pista estándar es de 3 km), probando la ergonomía del cockpit y comprobando que todo está en orden.
Será un día extraño, porque el coche rodará según lo previsto, pero la presentación tendrá lugar ‘en frío’ a través de internet, sin que la prensa y la televisión estén invitadas.
Los técnicos se dedicarán a revisar el SF-24 porque al día siguiente, miércoles 14 de febrero, el coche rojo será la estrella del día de filmación.
Para el personal del Cavallino será un día importante: los dos pilotos, además de dedicarse al rodaje comercial, realizarán la primera prueba de evaluación real del coche, ya que este año autoriza 200 km, el doble que el año pasado.
