Ejecución del «número dos» de Hamas en Líbano violó el derecho humanitario, dicen expertos de la ONU

Advierten que podría constituir una «ejecución extrajudicial», pues Israel no ha proporcionado ninguna justificación legal para el ataque

Ginebra.- El presunto uso extraterritorial de drones letales por parte de Israel para ejecutar al «número dos» del grupo terrorista palestino Hamas y otras seis personas más en una explosión registrada la semana pasada en Líbano no está amparado por el derecho internacional humanitario, denunciaron expertos de la ONU.

«Todos los Estados tienen prohibido privar arbitrariamente a las personas de su derecho a la vida en operaciones militares o de seguridad en el extranjero, incluso en la lucha contra el terrorismo«, indicaron dos expertos en un comunicado.

Condenaron la acción el relator de la ONU sobre la promoción y protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales en la lucha contra el terrorismo, Ben Saul, y su homólogo sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, Morris Tidball-Binz.

Ambos recordaron que estos homicidios podrían constituir «ejecuciones extrajudiciales«, dado que Israel no ha proporcionado ninguna justificación legal para el ataque ni lo ha comunicado al Consejo de Seguridad, tal y como lo exige el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas.

Además, recordaron que Israel no estaba ejerciendo la legítima defensa porque no presentó pruebas de que las víctimas estuvieran cometiendo un ataque armado contra Israel desde territorio libanés.

También condenaron las palabras del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y otros altos cargos de Israel, que amenazaron con matar a dirigentes de Hamas en cualquier parte del mundo.

«No hay base legal para ataques geográficamente ilimitados contra miembros de un grupo armado dondequiera que se encuentren», recordaron los expertos de la ONU.

En el comunicado advirtieron que el ataque israelí constituía una «peligrosa» escalada regional del conflicto de Gaza, una violación de la soberanía de Líbano y un uso «prohibido» de la fuerza militar contra territorio libanés, según los principios humanitarios de la ONU.