- La famosa actriz mexicana recordó que no es correcto hablar de los cuerpos ajenos y demandó empatía pues “nunca sabes cómo puedes hacer sentir a la persona”
Los trastornos alimenticios y su vinculación con los estándares de belleza continúan siendo motivo de discusión en la esfera pública. Zuria Vega, reconocida actriz mexicana, se ha convertido en el centro de las interrogantes al respecto, desatando debates sobre la delgadez y los cuerpos en la industria del entretenimiento y el por qué no se debe opinar de los cuerpos ajenos.
La controversia surgió cuando la prensa y seguidores en redes sociales cuestionaron el aspecto físico de la actriz, sugiriendo la posibilidad de un trastorno alimenticio, particularmente anorexia. Ante estas insinuaciones, Zuria Vega se mostró molesta a responder, condenando la intrusión sobre los cuerpos ajenos y reafirmando la importancia de no hablar sobre el aspecto físico de nadie, ni hombres ni mujeres.
Durante su participación en un evento, fue cuestionada por un reportero sobre si había sufrido algún trastorno alimenticio y la actriz respondió enfáticamente:
“Pues no sé, ¿tú me ves al borde la anorexia? No creo, yo creo que no se debe de hablar de los cuerpos ajenos, creo que eso está fuera de este año y la moda, y no hablar de los cuerpos de nadie, de ningún hombre, ni de ninguna mujer porque nunca sabes cómo puedes hacer sentir a la persona, ni por lo que está pasando o no está pasando, cada cuerpo es distinto”, comentó ante diversos medios de comunicación.
A pesar de su postura firme, las preguntas persistieron, indagando si había recurrido a dietas extremas para adaptarse a los estándares impuestos por la moda. Zuria respondió tajantemente con un “no” y subrayó la inapropiación de cuestionar los cuerpos de otros.
En sus redes sociales, especialmente en una publicación donde lucía un atuendo de un evento reciente -Hombre del Año por la revista GQ México-, las especulaciones sobre su delgadez continuaron. Sin embargo, la actriz ha mantenido su postura de privacidad y rechazo a la intrusión en temas personales, incluyendo su aspecto físico.
