- Congregó a la feligresía la visita del Obispo de Matehuala Monseñor Margarito Salazar a Santo Domingo
Concurrida y muy colorida resultó la visita del Obispo de la diócesis de Matehuala, monseñor Margarito Salazar, al municipio de Santo Domingo, con motivo de la bendición y arranque de la construcción de la nueva capilla en la comunidad de la Congregación, donde de manera personal ofició la misa de celebración de inicio de la obra.
En el acto, el Obispo agradeció la presencia de las autoridades municipales encabezadas por la presidenta, Celeste Mata Esparza, pues señaló que eso refleja, además de cercanía con la comunidad, sensibilidad con las necesidades de los pobladores del municipio pues los apoyos que se requiere muchas veces no son sólo de índole material, sino también espiritual, ya que no sólo de pan vive el hombre.
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El prelado reconoció la buena disposición y cercanía que tienen las autoridades con la feligresía y los pobladores en general, que se ve en las obras que benefician a las comunidades.
Agregó que la Iglesia ve con buenos ojos todas las acciones en favor de la gente más necesitada, como las que realiza la administración municipal, porque son acciones que definen al humanismo y son propias del verdadero amor al prójimo.
Por su parte, Celeste Mata Esparza celebró la presencia del obispo como el alto jerarca que es de la iglesia católica en el estado y le reiteró la bienvenida a este municipio del altiplano potosino, el mayor en extensión territorial el cual, pese a su aridez natural, la sequía atípica y de sufrir el recorte al presupuesto municipal, sigue haciendo todo lo humanamente posible a través del gasto responsable de los recursos públicos, para continuar con el desarrollo que ha impulsado siempre el proyecto, “Por un Nuevo Santo Domingo para todos”.
Dijo que: “’Nuestro gobierno tiene como objetivo mejorar las condiciones de vida de todas las personas del municipio, y nuestros esfuerzos tienen como objetivo siempre el combatir la pobreza de raíz, porque son los pobres los que más sufren.
Por eso coincidimos con la iglesia que busca ser un apoyo y consuelo a los sufrientes en los momentos más difíciles. Finalmente, reiteró: “sea bienvenida su presencia Monseñor, a nuestro municipio de Santo Domingo”.
