Trump explota ante el juez: «Usted falló contra mí y me llamó fraude antes de saber nada»

  • La FGR impugnará la medida cautelar de prisión domiciliaria otorgada a favor del exprocurador general de la República, Jesús Murillo Karam, por parte del juez de Distrito José Rivas González.

El expresidente Donald Trump explotó este lunes durante su declaración como testigo en el juicio contra la Organización Trump y recriminó al juez haber fallado en su contra el cargo de fraude, de manera sumaria, «antes de saber nada» sobre él y sus negocios.

El juez Arthur Engoron, que desde el inicio de la sesión se había mostrado enfadado por lo que consideraba «discursos» de Trump en lugar de respuestas, escuchó con gesto impasible los comentarios en tono airado del acusado, que estaba sentado a apenas dos metros de él.

«Usted falló contra mí, dijo que era un fraude antes de saber nada de mí», espetó mirándole directamente, tras lo que sostuvo que «el fraude es el tribunal» porque «no valoró las propiedades correctamente», y se vanaglorió de haber hecho «un buen trabajo» como presidente de EEUU.

Trump sacó a colación la valoración de los tasadores públicos del condado de Palm Beach, en Florida, que estimaron que su mansión de Mar-a-Lago se situaba en unos 18 millones de dólares, y aseguró que «vale cientos de millones más y todo el mundo lo sabe».

Previamente, el expresidente defendió en repetidas ocasiones que los documentos de condición financiera en los que se basa el caso no tienen valor porque incluyen una cláusula que advierte que los datos son subjetivos y alienta a hacer análisis propios y «no apoyarse» en ellos.

Esa cláusula de advertencia «siempre se respeta en los tribunales, excepto por parte de este juez particular», agregó el acusado, que aseguró que «si hubo un error, no fue material», pero en todo caso «cualquier error está cubierto por la cláusula».

Engoron le interrumpió únicamente para invitarle a «aprender sobre la cláusula» leyendo su opinión implícita en el fallo sobre fraude persistente contra Trump y los otros acusados, que quita mérito a ese argumento.

El exmandatario también arremetió contra la fiscal Letitia James, sentada en primera fila del público y que ha recibido numerosos ataques, igual que el juez, a través de las redes sociales y la campaña del favorito republicano para las próximas elecciones; en esta ocasión, de viva voz, los llamó «corruptos».

Tras varios minutos de ataques airados, el fiscal Kevin Wallace, que inicialmente había cuestionado el valor de las propiedades de la empresa, le preguntó: «¿Ha terminado?», y Trump contestó escuetamente que sí mientras el juez esbozaba brevemente una sonrisa. MULTAN A TRUMP POR HABLAR DEL JUICIO

La fiscal de Nueva York, Letitia James, y el juez Arthur Engoron han sido blanco de la ira de Trump desde que se inició este juicio a principios de octubre.

El magistrado le ha impuesto dos multas, de 5 mil dólares y 10 mil dólares, al dictaminar que el expresidente había violado una orden de silencio impuesta después de que arremetiera contra la secretaria judicial en las redes sociales.

El magnate ha calificado este caso de «la mayor caza de brujas de la historia del país» y dijo que James está «fuera de control».

«Al final, lo único que importa son los hechos y los números. Y los números, amigos míos, no mienten», dijo este lunes James al llegar a la corte. Hasta ahora han declarado dos de sus hijos: Donald Jr y Eric, ejecutivos de la Organización Trump, un conglomerado que gestiona rascacielos, hoteles de lujo y clubes de golf en todo el mundo. Antes del juicio, Engoron había dictaminado que la oficina de James había mostrado «pruebas concluyentes» de que Trump había exagerado su patrimonio neto en documentos financieros entre 812 millones y 2 mil 200 millones de dólares entre 2014 y 2021.

Como resultado, el juez ordenó la liquidación de las empresas que gestionaban los activos en cuestión, como los rascacielos de la Torre Trump y del 40 de Wall Street, en Manhattan, entre otros bienes.