Siendo Santa María del Río la cuna del reboso era necesario un lugar dedicado a este arte. En este lugar se busca crear exposiciones que muestren el recorrido de esta práctica.
Además de los orígenes, las primeras obras y los artesanos actuales.
Es una gran cueva dividida en cuatro ubicada en medio de una selva por lo que albergan una gran variedad de biodiversidad.
Se ubican a 8 km de la cabecera municipal y para acceder hay que ascender por unas escaleras rodeadas de abundante vegetación.
Fue inaugurado en 2019 con el objetivo de promover, dentro y fuera del museo, los talleres en los que cientos de visitantes puedan participar.
Además de rebozos también hay máscaras talladas en madera, textiles, cerámica y los diversos mecanismos que se han utilizado en la elaboración de los rebozos.
Está situado en el centro de Santa María del Río y es el edificio más colorido.
