Todos tenemos suelo pélvico, tanto hombres como mujeres.
Es fundamental cuidarlo durante el embarazo y tras el parto, pero también cumple objetivos importantes en los varones. Tanto es así, que últimamente se empieza a difundir su implicación en la disfunción eréctil.
¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA
Al parecer, aunque el origen de la impotencia es sobre todo vascular, una musculatura pélvica debilitada también ejerce cierta influencia.
El urólogo es quien debe diagnosticar y determinar el tratamiento de la disfunción eréctil, ya que puede ser un síntoma de afecciones médicas subyacentes, como enfermedades cardiovasculares o diabetes, que también deben ser tratadas.
Otros profesionales de la salud pueden contribuir a mejorar aspectos concretos; en el tema que nos ocupa, los fisioterapeutas pueden aconsejar ejercicios, herramientas y hábitos de vida para fortalecer la musculatura del suelo pélvico.
Estas son las cuatro funciones principales del suelo pélvico:
- Función de sostén de los órganos de la cavidad abdominal y pélvica.
- Función de continencia, regulando el funcionamiento de apertura y cierre de los esfínteres en la micción y en la defecación.
- Función sexual, contribuyendo a mejorar la calidad de las relaciones sexuales.
- Función reproductiva, al actuar como conductor del feto durante el parto.
Los ejercicios para fortalecer el suelo pélvico no son exactamente los mismos que se realizan en el caso de la debilidad del suelo pélvico femenino, ya que existen algunas diferencias, sobre todo anatómicas.
En algunos casos son similares; por ejemplo, la contracción del suelo pélvico de una manera global se basa en dar la orden de cortar el chorro de orina -pero sin hacerlo realmente, solo se trata de imitar ese gesto- o la de aguantar las ganas de un gas.
Pero también hay otros ejercicios más específicos, en los que la órden será, por ejemplo, pedir que se intente retraer el pene.