Existen posiciones sexuales que además de darnos mucho placer también nos ayudan, tanto a nosotras como a nuestras parejas, a durar mucho más tiempo en el sexo. No está demás mencionar que el tiempo no lo es todo, sino la conexión que generas y el placer que vives en el acto.
La cucharita: Esta es una posición sexual que además de ayudarle a tu galán y a ti a durar más en el sexo, también les dará la oportunidad de explorar otras zonas erógenas y estimularlas de igual forma. Te contamos cómo es la cucharita: ambos se tienen que recostar de lado viendo hacia el mismo lado de forma que él quede detrás de ti. La postura hará que los movimientos sean lentos y poco profundos lo que ayudará a prolongar el tiempo de penetración (y de placer).
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La tabla de surf o la mujer encima: Esta posición sexual es como el misionero invertido. En vez de que el hombre esté arriba, él debe quedar recostado volteando hacia arriba, mientras que tú como mujer te posiciones encima de él. Esto te dará el control absoluto de los movimientos al igual que el ritmo. Si mantienes un ritmo lento pero constante, el sexo durará más tiempo y seguirá siendo muy placentero. Si deseas potenciar estimular otras zonas erógenas, te recomendamos usar juguetes sexuales para poder elevar tus sensaciones.
Perrito reinventado: Todas conocemos la posición de perrito: aquella en la que la mujer se pone en cuatro mientras que el hombre la penetra por atrás. Ahora, la posición del perrito reinventado es muy similar, pero en vez de que la chica esté sobre sus manos y rodillas, ella debe estar recostada con el pecho sobre la superficie, mientras que él se tumba sobre ellas con las rodillas ligeramente flexionadas. Los movimientos serán suaves y lentos, pero constantes. El ritmo ayudará a que ambos duren más en la cama y también les dará un momento muy íntimo.
Flor de loto: La flor de loto es una de las posiciones sexuales que pueden ayudarte a ti y a tu pareja a durar más tiempo en el sexo. Él debe estar sentado ya sea sobre una silla, un sillón o incluso en el borde de una cama, mientras que ella se sienta sobre él rodeándolo con las piernas. Es una postura muy íntima ya que requiere mucha cercanía entre sus cuerpos. Es esa misma cercanía la que los obligará a llevar un ritmo lento y profundo que permitirá extender el tiempo de penetración.
