Tori Spelling ha afrontado un sinfín de cambios desde que en junio su antiguo esposo Dean McDermott anunció su separación a través de Instagram.
Poco después salió a la luz que estaba viviendo en un motel con sus cuatro hijos Liam, Stella, Hattie, Finn y Beau y posteriormente se mudó a una caravana debido a una grave infestación de moho en su casa de alquiler en Los Ángeles.
Al parecer, su madre Candy Spelling le ofreció una vivienda para que ella pudiera instalarse allí con sus nietos, pero Tori rechazó la oferta.
En un gesto similar, el agente inmobiliario Josh Flagg le propuso alojarse en su mansión, pero sólo permaneció allí unos días antes de optar por el motel.
Las decisiones de Spelling han sorprendido a muchos.
Podría haber optado por una vida de lujo en Beverly Hills.
Sin embargo, Tori parece estar sacando el mejor partido de su nuevo alojamiento.
Recientemente, disfrutó de un día en la playa con sus hijos y celebró el cumpleaños de la «abuela» Isabel, que es en realidad una mujer que forma parte de su vida desde que tenía 13 años.
Su actual situación ha causado un gran revuelo: se rumorea que amigos y familiares están «consternados» y que su ex está «horrorizado» por las condiciones en las que viven su exesposa e hijos.
Los motivos por los que ha optado por una caravana no están claros, pero ella asegura que está viviendo una «aventura loca», en el mejor de los sentidos.
A principios de agosto compartió varias fotografías de su día a día en la caravana para asegurar que está creando recuerdos maravillosos junto a sus hijos.
