El presidente Joe Biden declaró en la mañana del jueves el estado de catástrofe natural para Hawái, lo que permitirá liberar «fondos federales a disposición de los afectados.
Las islas de Hawái están enfrentando una crisis sin precedentes debido a los incendios forestales que han arrasado, principalmente en la isla de Maui. Estas impactantes dimensiones de la devastación han sido capturadas por imágenes satelitales proporcionadas por Maxar, la destacada empresa de tecnología espacial con sede en Colorado.
Las imágenes, publicadas el miércoles, presentan una visión desoladora de la isla de Maui, donde cientos de hogares y negocios han sido consumidos por las llamas. En particular, la comunidad de Lahaina ha sufrido una pérdida abrumadora, con gran parte de la localidad completamente destruida por los incendios mortales.
James Tokioka, director del Departamento de Negocios, Desarrollo Económico y Turismo, expresó su conmoción frente a la devastación: «Nadie estaba preparado para esto… La gente local lo perdió todo. Perdieron su casa, perdieron sus animales. Y es devastador».
Las imágenes satelitales de Maxar han proporcionado una comparación dramática del antes y el después de la tragedia. El área de Banyan Court de Lahaina, considerada un sitio histórico por el gobierno, ha sido particularmente afectada. Antes del incendio, esta área albergaba el Banyan Tree vivo más antiguo de la isla, un símbolo con más de 150 años de historia. Tras los incendios, el paisaje muestra una transformación desoladora, con estructuras carbonizadas y árboles calcinados.
El centro histórico de Lahaina, que solía ser la capital del Reino de Hawái durante el siglo XIX, también ha sufrido daños considerables. El distrito, designado Monumento Histórico Nacional, presenta una imagen desoladora en las imágenes posteriores al incendio, con edificios históricos devastados y un centro comercial que fue consumido por las llamas.
Las autoridades del condado de Maui han informado que más de 271 estructuras resultaron dañadas o destruidas en Lahaina. A pesar de la magnitud de la destrucción, las autoridades aún no han establecido una fecha para controlar por completo los incendios o para permitir que los residentes regresen y evalúen personalmente los daños.
