Según un estudio realizado en el Reino Unido, el consumo de anticonceptivos orales puede aumentar el riesgo de padecer cáncer de mama hasta un 30%.
El estudio tomó en cuenta la participación de 10,000 mujeres inglesas menores de 50 años que padecen o padecieron cáncer de mama y que consumen o consumían anticonceptivos orales de forma reciente o durante largos periodos de sus vidas.
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Lo relevante del estudio es que encontró que los anticonceptivos que aumentan este riesgo son hechos a base de progesterona, ya sea como único ingrediente o mezclado con progestina y estrógenos.
Además, se encontró que no solamente los anticonceptivos orales producen este aumento porque también encontraron relación en el implante subdérmico con progesterona y dispositivos que contuvieran esta hormona como factores de riesgo para padecer cáncer de mama.
Tomando en cuenta la información de los investigadores, podría haber una estrecha relación entre el consumo de anticonceptivos orales y un aumento del 30% en el riesgo de padecer cáncer de mama.
¿Cuáles son los efectos secundarios de las pastillas anticonceptivas?
Como pudiste observar arriba, las pastillas anticonceptivas pueden tener efectos adversos a la salud, pues además del cáncer de mama, pueden provocar presión arterial alta con riesgo de formación de coágulos que bloqueen las arterias, aumentando las probabilidades de sufrir un infarto. Su uso también se asocia a otros tipos de cáncer como el cáncer cervical.
A pesar de los efectos secundarios, estos anticonceptivos también han mostrado tener un efecto positivo en la disminución del cáncer de tipo endometrioide, seroso y limítrofe hasta en un 20%.
¿Por cuánto tiempo puedo tomar pastillas anticonceptivas?
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomienda su uso hasta por 5 años, sin embargo, se recomienda acudir a revisión con algún especialista para confirmar su uso o desecharlo.
¿Qué métodos anticonceptivos NO dan cáncer?
A pesar de lo que has leído hasta ahora, no todo es malo, pues existen alternativas para la planificación familiar y protección contra enfermedades de transmisión sexual que no contienen hormonas, como es el caso del dispositivo intrauterino (DIU) de cobre o los preservativos, que son métodos anticonceptivos de barrera y no hormonales, por lo que no se les relaciona con la incidencia de cáncer.