¿Qué es la púrpura?

Este trastorno sanguíneo y autoinmune no es muy frecuente. De todas maneras, había cobrado relevancia desde el 2020 por haberse asociado a un efecto adverso de ciertas vacunas

En medicina, se habla de púrpura cuando hay un moretón en la piel o en las mucosas que mide entre 4 mm y 10 mm. O sea, el término se emplea para describir una mancha violácea que se forma por la salida de sangre desde el interior de los vasos hacia la piel.

Estas manchas pueden ser múltiples o aparecer de a una por vez. Además, si cambia el tamaño, también cambia la denominación. Cuando miden menos de 4 mm ya no son púrpuras, sino petequias.

A la inversa, si superan los 10 mm, son equimosis.

Con base en esta definición, luego se clasificaron las enfermedades que causaban los hematomas entre 4 y 10 mm. En realidad, se incluyó a todas las manchas hasta 1 cm.

Así, podemos hablar de los siguientes cuadros clínicos:

Púrpura trombocitopénica idiopática: es la enfermedad que padece Julia Roberts. Algunos autores han propuesto cambiar su nombre y denominarla trombocitopenia inmunitaria. Luego la describiremos mejor.

Púrpura trombocitopénica trombótica: el mecanismo de esta enfermedad es complejo y puede resultar mortal. Lo que sucede es que las plaquetas de la sangre tienden a agruparse para formar coágulos. Los mismos son capaces de trasladarse a los órganos vitales, produciendo infartos o accidentes cerebrovasculares.

Púrpura fulminante: es una forma típica de los recién nacidos. Hay una carencia de proteínas necesarias para controlar la coagulación, por lo que se forman trombos que pueden obstruir la circulación.

Púrpura senil: es una presentación clínica de los adultos mayores. Sucede que los vasos sanguíneos pequeños se vuelven más frágiles por el envejecimiento y trasudan sangre, formando hematomas visibles.