Kamasutra: todo lo que hay que saber sobre este libro. Parte 2

Esta obra va mucho más allá del acto como tal

Dándole continuación a la nota de ayer donde le dimos seguimiento a los primeros puntos acerca del kamasutra seguimos con lo siguiente:

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5. Lo relevante de la seducción

En el capítulo del Kamasutra, se le otorga a la seducción un lugar de privilegio en el arte de amar. Quizá, mucho más importante del que pueda tener el coito propiamente dicho. Cotejar a una mujer, lograr la conquista con buenas actitudes y los juegos románticos son cruciales.

El sexo es el broche que otorga un cierre brillante a toda esa previa. Como mencionamos anteriormente, es un momento divino de unión en cuerpo y alma de dos personas que se encuentran para mejorarse.

6. Los dibujos llegaron con los años

La versión original carecía de figuras o dibujos que acompañaran al texto. Años más tarde, algunos autores hicieron nuevas ediciones con dibujos a mano. En la actualidad, ya se encuentran cientos de libros basados en el Kamasutra con todo tipo de diseños. Incluso, algunos ya vienen con videos eróticos reales.

7. El libro más famoso

Seguramente, el monje hindú no pensó que su recopilación de historias de época iba a convertirse en lo que es. Sin lugar a dudas, es el libro más famoso de la historia en el campo de la sexualidad y las relaciones de pareja. Pasaron 18 siglos y el Kamasutra sigue siendo relevante en todo el mundo. De hecho, ha sido traducido a la mayoría de los idiomas existentes.

Consejos útiles sobre el Kamasutra

Muchos encuentran en el Kamasutra los consejos más sabios para triunfar en el amor, ya que cada tema está escrito con la máxima precisión y categoría. En ellos se describe minuciosamente cada posición sexual y cada forma de seducir. Y esos mismos detalles se tienen en cuenta a la hora de enamorar y de conectar emocionalmente.

Por último, para sentirse plenos y experimentar las premisas de este libro no solo hay que pensar en el coito. El acto sexual en sí mismo no tiene relación con la idea principal de esta obra. Por el contrario, hay que preocuparse por cada caricia, cada gesto, cada beso y, sobre todo, por la energía que se entrega en el encuentro. Esto dará como resultado la felicidad y la satisfacción de las dos personas.