Hombre que vino del sur y conquisto el corazón del único mundo.
Tal como lo escribí en mis ultimas 2 colaboraciones para esta mi casa editorial, El Heraldo de San Luis Potosí, la de hoy sería y por mucho la marcha de las marchas; en mis mas de 30 años de participación en política y habiendo hecho de todo, nunca había presenciado un evento como el que hoy me tocó vivir.
De inicio porque desde que Francisco I. Madero, cabalgó con los cadetes del Heroico Colegio Militar, en lo que conocemos como la “marcha de la lealtad”, nunca un Presidente de México había caminado con su gente, aunque a diferencia de Madero, el presidente López Obrador no cabalgó, caminó palmo a palmo las Avenidas de Paseo de la Reforma, Juárez y 5 de Mayo para arribar al Zócalo de la Ciudad de México y a diferencia de aquel entonces lo hizo acompañado de la gente y no de la milicia.
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Llegué a las 7:45 horas de la mañana a la esquina de Reforma y el monumento de la Estala de Luz y ya estaba repleto de personas, no se cuantas eso se lo dejaré a otros púes el número no es el fondo, pero aquello era un mar de seres humanos que aún con el frío de la mañana característica de la Capital del País ya echaban porras y grataban consignas en apoyo a López Obrador, al movimiento del que ellos participaron y del que contaban anécdotas de cuando marcharon con el Tabasqueño en otras épocas y en otras condiciones.
Tratando de tener una mejor perspectiva, caminé o mejor dicho me abrí paso hasta la Glorieta del Ángel de la Independencia, en el trayecto escuché con atención un par de conversaciones de algunos jóvenes que caminaban junto a mí que iban de la colonia Iztapalapa, hablaban de Andrés del “preciso”, de saludarlo otra vez como cuando lo vieron en el zócalo, es la neta -dijo uno-, se la van a pelar -contesto el otro.
35 minutos después llegue a un ángel repleto, en el que estaban todos los medios de comunicación nacionales e internacionales y cuando uno de los reporteros de televisa se acerco a unas señoras disfrazadas de Adelitas, que gritaban arengas a favor, el grito fue unánime ¡Fuera televisa, fuera televisa!, por fin después de que alguien pidió calma y respeto para todos, el entrevistador pudo preguntar a las señoras ¿Por qué están aquí?, por que nos obligaron respondieron casi al mismo tiempo, desde luego el periodista preguntó ¿Quién? Y respondió una “nuestras convicciones y nuestra lealtad al movimiento y al Presidente”, todos festejaron con aplausos y nuevas consignas.
A las 9:30 llegó Andrés Manuel López Obrador, acompañado de su esposa y de quienes el llamó “las corcholatas”, Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López y Marcelo Ebrard, curioso fue que, aunque hubo algunas porras a favor de unos y otra la atención central fue el Primer Mandatario, al que se le arremolinó la gente.
Así inició lo que sería una caminata de más de 5 horas hasta la plancha del Zócalo y es que todas las personas querían verlo, saludarlo, tomarse la “selfie”, con el líder del movimiento con el hombre que había caminado desde el sur primero solo y luego con ellos hasta el Corazón del Único Mundo, la Ciudad de México, para ser su líder y guía para ser el Presidente que ellos acompañaron como candidato en tres ocasiones hasta que conquistaron la Tenochtitlan.
Caminó lento en medio de una multitud, que en momentos hacía que mas que uno caminara flotara pues te movías como jalado por una ola humana, y así sin más parafernalia en seguridad que los suyos, (el Secretario de Gobernación, el Director del INSABI) algunos funcionarios y su personal de logística se abrió paso para saludar a grupos sociales, sindicatos, ciudadanía en general que lo detenía para saludarlo, avanzó sin miedo como quien se sabe arropado y seguro de que la gente no le va a hacer daño, de que la gente quiere a su presidente.
Después de cinco horas, como ya comenté, llegó a la plancha del Zócalo un Andrés Manuel, asoleado y sudoroso, pero con el rostro contento, feliz de ver, sí a la multitud reunida que se encontraba en una gran fiesta, pero más que eso porque él sabe que le volvió a ganar a los que señala como adversarios.
Del mensaje me quedo con tres puntos, el primero la atención a poco mas de 30 millones de familias que reciben cuando menos un programa social, destacando las becas Benito Juárez a chavos de prepa (4 millones redondos), el apoyo a los adultos mayores y los programas directos al campo además de Sembrando Vida; el segundo fue reiterar su convicción de la no reelección y de asegurar que su esposa no estará en la boleta en el 24 en ningún cargo de elección popular.
El tercer punto merece un análisis más detallado púes desde mi óptica es el más sensible pues le dio el marco filosófico a la 4T, en lo que el llamo el “Humanismo Mexicano”, que pone al centro a la honestidad del pueblo como la mayor riqueza de México.
Al final se entonó el Himno Nacional, que siempre nos hace vibrar y nos emociona hasta la médula.
CONCLUYENDO
- No se puede dejar pasar el hecho de que mucha gente llegó a la marcha por su propio pie y por sus medios, cosa que vi mientras caminaba del parque España a la estela de Luz.
- También hubo convocatoria de los 22 Gobernadores a fines a la cuarta transformación (San Luis y Morelos son del Partido Verde), estuvieron todos con sus contingentes, es de resaltar la organización y convocatoria del Gobernador Ricardo Gallardo que encabezó a las y los potosinos que fueron a la marcha pues fue uno de los contingentes mas copiosos, bien está en los suyo.
- Y no faltaron simpatizantes de estados donde MORENA o sus aliados no tienen gobierno, así que estuvieron presentes los 32 Estados del País de la A a la Z sin falta.
- El Presidente demostró no su capacidad de convocatoria, ni el músculo operativo, enseñó que él esta con su gente y que esta lo quiere, cuida y respeta; no hubo ni un solo reclamo.
- Me sorprendió ver la gran cantidad de jóvenes en la marcha y la concentración en el Zócalo, los encuestólogos se me hace que se están equivocando.
- El Presidente ganó hoy por segunda ocasión una Presidencia de la República.
Autor: Emigdio Ilizaliturri
