Adela Velarde Pérez “La Adelita”

Risueña, delgada, y bonita; pronto todos los soldados de la tropa comenzaron a llamarla Adelita.

Adela Velarde Pérez nació en Ciudad Juárez, Chihuahua, un día 8 de septiembre del año 1900. Dicen quienes la conocieron que heredó el carácter fuerte e indomable de su abuelo, el General Rafael Velarde, decidido partidario, pero además, amigo personal de Benito Juárez, a quien protegió de casa en casa durante su presidencia itinerante.

Adela fue una heroína de la Revolución Mexicana, una mujer que a los 13 años en contra de la voluntad de sus padres se enlista en la Revolución Mexicana, se incorpora por su propia decisión un grupo de enfermeras que recién había creado Doña Leonor Villegas de Magnon, presidenta de la Cruz Blanca.

Era 7 de febrero de 1913 cuando Adela Velarde Pérez sube por primera vez al tren de enfermería en la Ciudad de Chihuahua, época de donde surgió la famosa fotografía de Jerónimo Hernández, en donde se ve a un grupo de mujeres vistiendo rebozo en las escaleras del transporte. Su misión a partir de ese momento era atender a los heridos del Ejército Constitucionalista.

Ella, Adela prefirió dejar la vida cómoda holgada y sin preocupaciones que le daba su familia de muy buena posición y alentada por Leonor se decidió servir, no como soldadera, sino como enfermera, inicialmente del regimiento del Coronel Alfredo Breceda.
Risueña, delgada, y bonita; pronto todos los soldados de la tropa comenzaron a llamarla Adelita.

Su amor

Conoció al sargento Antonio Gil del Río Armenta, miembro de las Fuerzas de Francisco Villa, con quien sostuvo una relación amorosa por un año, la cual terminó cuando él perdió la vida en la batalla de Gómez Palacio, Durango, la más sangrienta de la Revolución, consignando más de seis mil personas muertas. Fruto de su amor, tuvo un hijo, quien también murió sirviendo en la Segunda Guerra Mundial.

Pese a la pérdida de su amor, ella siguió trabajando con los soldados.

Según la historia, Antonio Gil fue el compositor del famoso corrido revolucionario “La Adelita”, ya que le llevaba serenata al tren de enfermería.

Siguió su lucha

En 1916, La Asociación de Veteranos de la Revolución reconoció a Adela Velarde Pérez como enfermera militante desde 19134 en la División del Norte, bajo el mando del General Carlos Martínez, así como en el Ejército del Noreste en varias regiones (Chihuahua, Zacatecas, Torreón, Aguscalientes, Distrito Federal Y Morelos. Tuvo una participación destacada en contra del usurpador Victoriano Huerta.
Tras la Revolución

Dicha acción la hizo ser considerada oficialmente veterana de la Revolución el 22 de febrero de 1941. Cuando la Secretaría de la Defensa le otorgó en vida la Condecoración al Mérito Revolucionario.

Veinte años después, el Congreso de la Unión le dio una pensión vitalicia. En 1962, fue nombrada miembro de la Legión de Honor Mexicana.

Homenaje

El 20 de noviembre del 2014 la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través del Consulado de México en Del Río, Texas, celebró ese día en el 104 aniversario del movimiento armado en la República Mexicana, y ahí tuvo lugar el primer homenaje oficial que se realizó a Adela Velarde Pérez, La Adelita.

El homenaje fue en el cementerio de San Felipe, ahí en Del Río, Texas, en Estados Unidos, donde más de 100 personas se juntaron en torno a su tumba le rindieron homenaje a la mujer cuya vida y entrega a la causa de la Revolución inspiró una de las canciones más conocidas de todo el repertorio musical en México, traducida, además, a varios idiomas.

¿Dónde están sus restos?

En 1965 se casó con el Coronel Alfredo Villegas. El matrimonio duró hasta el día de su muerte.

Descansan en Estados Unidos porque ahí fue donde ambos vivieron hasta que murió en 1971, el 4 de septiembre en Ciudad del Río, Texas.