“Significa mucho para mí ser parte de la historia”: Carlos Alcaraz

Con los aplausos y los ojos de 11.000 espectadores del Pala Alpitour de Turín, una situación que abrumaría a muchos jóvenes de 19 años, Carlos Alcaraz recibió el día de hoy en tiempo local el trofeo que le acredita como 18º número uno del mundo al final del año, el más joven de la historia por delante de Lleyton Hewitt, que lo consiguió con 20 años.

“Siento no haber podido jugar delante de vosotros”, les dijo. “Quiero dar las gracias a todo el mundo que me ha ayudado a llegar hasta aquí desde un pequeño pueblo de Murcia”, continuó antes de arrancarse a hablar en italiano para delirio del respetable: “Grazie mille a tutti, ci vediamo il prossimo anno” (Mil gracias a todos, nos vemos el próximo año”).

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La copa se la dieron antes de que empezaran a jugar, en unas ATP Finals en las que él no ha podido participar por una lesión abdominal, Tsitsipas y Medvedev, líder del ranking esta misma temporada durante 16 semanas.

El murciano lo será, como mínimo, 20, porque nadie podrá desbancarlo hasta el 29 de enero, fecha en la que finalizará el Open de Australia.

“Significa mucho para mí levantar este trofeo, ser parte de la historia del tenis con muchas leyendas es asombroso”, dijo Alcaraz en una rueda de prensa previa.

“Es una decepción no haber podido jugar las Finals, pero estas cosas pasan en el tenis, y al mismo tiempo puedo estar aquí recogiendo este premio a todo el trabajo duro del año”, añadió.

“Es increíble que venga un chico de 19 años y quite ese récord, pero es por lo que he trabajado. Es un dato que muestra el nivel del Big Four”, expresó sobre el hecho de que desde hace más de 18 años, el 1 de febrero de 2004, cuando lo fue Andy Roddick, no había habido ningún número uno que no se llamase Federer, Nadal, Djokovic o Murray.

Para llegar a este momento de gloria, Carlitos necesitaba que Nadal no alcanzara a la final y que Tsitsipas no fuera campeón invicto.

Ambas condiciones se dieron. “En el primer partido de Tsitsipas animaba a Djokovic, porque no tengo tanto trato con él, pero contra Rafa no puedo ir, toda la vida le he seguido, si me hubiera quitado el número uno, me hubiera alegrado por él”, advirtió Alcaraz, ha dado el salto más grande de siempre en la clasificación hasta lo más alto del final de un año a la conclusión del otro: del 32 al 1.