En los dominios de la naturaleza, esta especie tiene comportamientos sociales muy marcados.
Los elefantes son una especie muy particular dentro del reino animal. Su imponente tamaño, combinado con una aparente pasividad, despierta la admiración humana desde hace siglos.
Las manadas suelen estar lideradas por hembras y se mueven en grupo con sus crías.
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Además, se reconocen estructuras sociales de alta complejidad, así como comportamientos de juego, compasión, autoconsciencia y utilización de herramientas.
Todos estos atributos hicieron que el ser humano les preste atención y los incorpore a su cultura en formas muy diversas.
Los elefantes en la decoración pueden representar desde buena fortuna, fuerza de voluntad, perseverancia, fertilidad y bienestar espiritual, hasta ser parte central del panteón hinduista. Se trata de la representación de Ganesha, una de las figuras más importantes de una religión milenaria.
Pero todos estos significados dependen del sitio donde se encuentre el adorno de elefante, así como de su posición y su color.
Los numerosos atributos que tienen los elefantes por naturaleza, así como las características simbólicas que los humanos les asignamos, hacen que esta figura esté muy presente.
Diversas culturas los incorporaron desde hace siglos en leyendas, tradiciones y todo tipo de manifestaciones culturales.
Para algunas representa fidelidad, para otras mejora las relaciones familiares.
debido al comportamiento natural de la especie. En ciertos contextos, los elefantes transmiten protección y cariño.
También se utilizan en muchas prácticas de Latinoamérica, donde aparecen más asociados a la búsqueda de la buena fortuna.
En este caso, es fundamental la postura de la trompa, la cual debe estar hacia arriba para generar el efecto deseado.
