Actualmente, afortunadamente, las orientaciones e identidades sexuales son cada vez menos tabú en la sociedad.
Heterosexualidad, bisexualidad, homosexualidad o asexualidad son algunas de las que más hemos escuchado hablar, aunque suponen solo una pequeña representación: la sexualidad es un amplio espectro donde caben muchas orientaciones e identidades diferentes.
Sin embargo, y pese a la normalización de los últimos años, lo cierto es que algunas de las orientaciones sexuales menos conocidas siguen siendo un tema un tanto controvertido.
¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA
La autosexualidad entra en este grupo y, aunque Bernard Apfelbaum, terapeuta sexual, fue la primera persona que la definió como “la dificultad por sentir atracción sexual por otras personas”, actualmente ha evolucionado y ahora se habla de personas “que sienten una gran atracción hacia sí mismas, por lo que disfrutan más la masturbación que el sexo con otras personas”.
Eso no significa, sin embargo, que las personas autosexuales no sientan atracción hacia otras personas y que no mantengan relaciones sexuales con otras personas.
Como hemos dicho, la sexualidad es un espectro muy amplio, y cada persona es un mundo.
La autosexualidad no ha sido estudiada en profundidad, por lo que no se conoce demasiada información sobre esta orientación sexual.
“Puede significar sentir más atracción sexual hacia uno mismo que hacia otras personas o, directamente, sentir solamente atracción sexual hacia uno mismo”, explica Emmalinda MacLean, directora del programa ‘More Than Sex-Ed’ de Los Ángeles.
En definitiva, “una persona autosexual se siente especialmente, o exclusivamente, atraída y excitada por su propio cuerpo y no experimenta el mismo grado o intensidad de deseo sexual hacia los demás”.
Relaciones afectivas y discriminación
Sin embargo, que alguien sea autosexual no significa que no quiera o pueda tener pareja. Son cosas completamente diferentes: muchas personas autosexuales (que no son autorrománticas) buscan y disfrutan los lazos afectivos, románticos e incluso sexuales con los demás.
Y es que, que alguien sienta más atracción y deseo hacia sí mismo no significa que no se entregue en el placer de su pareja.
Así que sí, las personas autosexuales pueden tener relaciones afectivas y sexuales satisfactorias con otras personas. La clave es lógica y sencilla: comunicación.
“Cuanto más aprendas a comunicar tus sentimientos, necesidades, deseos y límites, así como a escuchar y entender los de los demás, mejor irán todas tus relaciones”, explica MacLean.