La mujer terminó con cuatro cejas tras un proceso estético, el problema es que no podía retirarlo
Nipapron Meeking, es una mujer de 32 años, la cual cuenta que acudió a una clínica en la provincia de Rayong, al este de Tailandia, para que le tatuaran las cejas, ya que quería hacer un viaje con amigos y quería lucir cejas nuevas.
La mujer cuenta que la clínica le cobró 35 libras (805 pesos mexicanos) por el tatuaje de cejas, según contó todo iba perfecto hasta que Nipapron se vio en el espejo y quedó horrorizada y que ahora tenía cuatro cejas en la cara porque el tatuador le había hecho el procedimiento arriba de sus cejas naturales.
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Tras el resultado, la joven se puso furiosa con el tatuador y él le prometió que le borraría las cejas de forma gratuita, el problema fue que a los pocos días el estudio cerró y Nipapron tuvo que vivir durante un año con cuatro cejas, tiempo en el que casi no salió de su casa.
“No mucho después de lo que pasó, la tienda cerró y no sé dónde está el dueño ahora.
La pasé muy mal viviendo con cuatro cejas en la frente, pero por suerte encontré a esta nuevo tatuadora”, contó.
