Tras un duelo entre adolescentes, la canadiense Summer McIntosh, de 15 años, venció a la estadounidense Katie Grimes, de 16, para proclamarse campeona mundial en los 400 metros combinados el sábado en Budapest.
En el último día de competencia, no se agregaron nuevas medallas en el lado francés. Por lo tanto, los Blues terminan los mundiales con ocho medallas, incluidos dos títulos, los de Léon Marchand en los 200 y 400 m combinados.
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Summer McIntosh también deja Budapest con dos títulos mundiales, tras ganar el miércoles los 200 metros mariposa.
“Katie Grimes es una gran competidora, me gusta mucho nadar contra ella porque estamos en la misma categoría de edad”, reaccionó la canadiense, que cumplirá 16 años en agosto.
“Establezco mis propios objetivos, y por lo general no son objetivos de clasificación, sino más bien sobre cómo quiero correr mi carrera, y creo que los he cumplido”, agregó el tímido canadiense.
“Me gusta lo que hago”
Además de McIntosh y Grimes, varios adolescentes se han revelado esta semana en Budapest. El rumano David Popovici, autor del doblete de 100-200 m libre con tan solo 17 años, fue el cabeza de cartel de esta nueva generación, junto a la italiana Benedetta Pilato, de 17 como él y coronada en los 100 m braza, o la australiana Mollie O’Callaghan, la nueva Reina de los 100 metros libres.
