Sergio Pérez es el rey de Bakú. El mexicano se convirtió en el piloto con más podios en este circuito al quedar en la segunda posición del Gran Premio de Azerbaiyán, donde Red Bull se adjudicó el 1-2 con Max Verstappen llevándose la bandera de cuadros. Así, ‘Checo’ sumó su cuarto podio en este trazado callejero y escaló a la segunda posición en el mundial de pilotos al aprovechar el abandono de Leclerc.
‘Checo’ soñó con la victoria con una gran largada
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La largada de ‘Checo’ no pudo ser más perfecta. Por tercera ocasión en su carrera partió desde la primera fila de partida en la segunda posición por detrás de Leclerc.
Cuando se apagaron los semáforos en Bakú, Pérez atacó rápidamente al piloto Ferrari al meter el auto por la parte interna de la pista y así tener la curva 1 hacia a su favor a la izquierda.
Previamente, el mexicano se abrió de buena manera para girar en esa primera curva y de pasó así también se defendió de Verstappen. Leclerc, en su intento por estirar la frenada, bloqueó sus neumáticos y así veía como perdía la posición con ‘Checo’ Pérez.
Al tomar la punta de la carrera, Sergio empezó a construir su ritmo de carrera y rápidamente ya tenía una ventaja de dos segundos sobre Charles Leclerc que sintió ligeramente la presión de Verstappen, que venía atrás a menos de un segundo.
La falla de comunicación que le costó la victoria a Checo
En la vuelta 9 comenzaron los problemas para Ferrari. En la curva 4 el auto de Carlos Sainz se quedó parado por una falla en el motor y ello derivó el virtual safety car. Red Bull mandó a llamar a Checo a los boxes para aprovechar la situación, sin embargo, el mensaje llegó tarde pues el mexicano ya había pasado la entada al pitlane. Por su parte, desde el muro de Leclerc reaccionaron a tiempo y metieron a tiempo al monesgasco para cambiar a gomas duras.
El mensaje incómodo hacia ‘Checo’
Un par de giros después se quitaron las banderas amarillas y Checo Pérez seguía en la punta pero comenzando a tener complicaciones con el desgaste de sus llantas. Ante ello, Verstappen recortó la diferencia con Pérez y en la vuelta 15 llegó la orden de equipo al decirle a ‘Checo’ “No hay que pelear”. Así, Verstappen, con DRS abierto, superó al tapatío en la curva 1.
En el giro 17 llegó la parada de ‘Checo’ Pérez. Una mala detención de más de cinco segundos le provocó perder la posición con Leclerc y salir muy justo por delante de Russell. Tres vueltas, en la 20, llegó el desastre para Ferrari pues Charles Leclerc también tuvo que abandonar por problemas en el motor. El monegasco lideraba la carrera cuando su auto se detuvo, dejando en bandeja de plata el 1-2 par Red Bull.
Verstappen heredó el liderato, seguido de Pérez y a partir de ahí no hubo muchas emociones en la parte delantera. Max y Sergio se dedicaron a gestionar la carrera, con un ritmo demoledor de Verstappen. En la vuelta 34 llegó la segunda parada para ‘Checo’ para poner otra vez duras. Sin embargo, para su mala fortuna la detención fue lenta (4.4 segundos), acabando con cualquier posibilidad de atacar a Max.
Verstappen se enfiló rumbo a la bandera de cuadros para conseguir una nueva victoria con 20 segundos de ventaja sobre Pérez que llegó segundo y así Red Bull firmó por tercera vez en el año el 1-2.
