El español se entrenó en la pista central, provocando varios gritos de apoyo por parte de los aficionados.
Traicionado por su pie izquierdo en el Masters 1000 de Roma hace poco más de una semana, Rafael Nadal apareció en la pista central de Roland Garros para un entrenamiento con público y golpeó la pelota sin molestias visibles.
Mientras el público veía al griego Stefanos Tsitsipas pelotear bajo la mirada de su padre, de repente estalló un clamor sobre las 18:00 horas locales: el rey Nadal entraba en ‘su’ pista, en la que ha levantado 13 veces la Copa de los Mosqueteros.
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Y cuando se regaba la tierra batida, el español esperaba turno pacientemente, mientras un millar de personas comenzaron a gritar “¡Nadal, Nadal!”.
Poco después, ‘Rafa’ comenzó a intercambiar golpes con su compatriota Jaume Munar. Primero de manera tranquila y después cada vez más fuerte. Apoyado por el público como si fuese un partido, Nadal correspondió con algunos saludos a los espectadores.
Ejercicios de volea, unos ‘smashs’, servicios… Nadal y Munar estuvieron sobre la pista una hora.
En un gran servicio de Munar, Nadal saltó sobre su costado izquierdo para impactar uno de esos derechazos a la línea a lo que tiene acostumbrados a los espectadores parisinos, sin que Munar pudiera hacer otra cosa que seguir con la mirada la pelota.
Golpes, carreras, saltos, deslizadas, algunos juramentos tras fallar… durante dos horas Nadal no ha economizado esfuerzos. Hizo de todo sin que en su rostro aparecieran los terribles gestos de dolor que acompañaron su derrota en octavos de final de Roma contra el canadiense Denis Shapovalov.
En la capital italiana, los habituales dolores con los que convive desde hace años en su pie izquierdo (donde sufre el llamado síndrome de Müller-Weiss) se hicieron insoportables, disparando todas las alarmas ante la proximidad de Roland Garros, aunque el español indicó que jugaría en París salvo que su lesión se lo impidiese.
Nadal conocerá su primer rival de Roland Garros (22 de mayo la 5 de junio) tras el sorteo que se celebrará este jueves.
Si sus molestias no lo impiden, el balear, que celebrará su 36º cumpleaños el 3 de junio, día de las semifinales, tomará parte en la carrera por su 14º título en Roland Garros, lo que llevaría a 22 su récord de victorias en los Grand Slam.