Es posible que nuestro cuerpo arrugue la piel de las manos y pies ante el agua para que podamos tener más agarre.
Seguramente has notado que cuando te quedas mucho tiempo en el baño o en la alberca los dedos de tus manos y de tus pies se ponen arrugados como pacitas o como si fueras viejito.
¿Te has preguntado por qué pasa esto? Después de que sales del agua y te secas bien la piel de tus manos y pies regresará a la normalidad ¿para qué sirven las arruguitas?
La piel se arruga con el agua
Aunque no lo podamos ver, toda la piel de nuestro cuerpo está recubierta de una especie de aceitito que nos ayuda a mantenerla hidratada y protegerla de la luz, del calor y demás factores. Esta cobertura se llama sebo y sale de nuestra piel de manera automática.
Cuando nos bañamos una parte de este sebo se va con el agua y cuando nos secamos la piel produce más y todo queda listo. Pero cuando pasamos mucho tiempo en el agua, el líquido comienza a ser absorbido en pequeñas cantidades en las manos y pies, en la capa externa de la piel, y se arruga.
Es lo mismo que si llenaras una bolsa con agua, se siente aguada y se arruga cuando la tocas.
Aunque por un buen rato pensamos que esto pasaba por casualidad, luego nos dimos cuenta que los dedos de las manos y de los pies son la única parte de nuestro cuerpo que se arruga con el agua, todo lo demás no.
¿Para qué sirve? Gracias a investigaciones y estudios recientes, científicos encontraron que la piel de las manos y de los pies se arruga como respuesta del nuestro cuerpo para protegernos de un accidente. Pura evolución.
Es posible que nuestro cuerpo arrugue la piel de las manos y pies ante el agua para que podamos tener más agarre. Probablemente ahora ya no usamos esta reacción biológica tanto pero muchísimos años atrás, a los seres humanos y a los monos se les arrugaba la piel para que no se resbalaran tan fácilmente en condiciones húmedas.
Cuando la piel está arrugada, tiene pequeños canales que permiten el paso del agua como un sistema de drenaje, así tenemos mucho más agarre.
Pasa lo mismo que con las llantas de los carros. Si los carros tuvieran llantas completamente lisas se resbalarían con el pavimento mojado. Pero con los canales que tienen, pueden frenar y funcionar mejor en condiciones mojadas.
Así que ya sabes, las arrugas en la piel de tus manos y pies cuando te metes a la alberca es una reacción de tu cuerpo para que tengas más agarre al piso y no te resbales tan fácilmente.
Pero no te preocupes, esto no se queda para siempre. En cuanto salgas del agua y te seques la piel regresará poco a poco a su estado normal.
