Disfrutar y realizar esta práctica con tu pareja es todo un arte.
El término ‘cunnilingus’ proviene de las palabras en latín ‘cunnus’ (vulva) y ‘lingo’ (lamer). Se trata de una práctica sexual que se remonta al siglo XVII y forma parte de las diferentes culturas del mundo.
En la India, la práctica sexual oral a la vulva se conocía como auparishtaka en el “Kamasutra”. De igual forma, en varias estampas japonesas se grafica este acto sexual y lleva el nombre de shunga.
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Según la sexóloga Agustina Fulgueiras, “el cunnilingus es la práctica del sexo oral donde se lame, chupa y mordisquea, ya sea con la lengua o los labios, tanto el clítoris, como la vulva y la vagina con diferentes intensidades”.
Disfrutar y realizar esta práctica con tu pareja es todo un arte. “Es mucho más que sacar la lengua a pasear”, señala la sexóloga Agustina Fulgueiras.
El clítoris tiene aproximadamente 8.000 terminaciones nerviosas y una buena estimulación pasar por los labios mayores y menores puede ocasionar la fruición femenina. Anímate a intentarlo y a disfrutar del máximo placer.
Revisa algunas pautas que la experta en sexualidad recomienda para proporcionar el máximo placer a través de esta práctica sexual.
No vayas directo al clítoris: La práctica se disfruta más si se crea expectativa, por lo que es mejor ir calentando el ambiente antes de llegar directamente al clítoris. P
ara comenzar una vez en la zona de la vulva, puedes acariciar y lamer las zonas cercanas a este órgano sexual al jugar con los labios internos, acariciar los externos con tu lengua, etc.
Elige el momento y lugar adecuado: Lo importante es que las personas involucradas estén relajadas y que se enfoquen mutuamente. Cada quien necesitará de un tiempo, ritmos y diferentes estímulos en cada caso.
Regula la intensidad: Es mejor empezar a estimular el clítoris de a pocos y de forma suave con la lengua para luego subir el ritmo, la intensidad y la dureza de los movimientos conforme a la respuesta corporal de la pareja.
“No queremos empezar a 1.000 revoluciones por minuto, recuerda que tratas con una zona altamente sensible y que necesita de mucha estimulación previa para que esté lista”, recalca Fulgueiras.
Usa lubricación: puedes usar extra lubricación con base agua que hará que tanto la lengua como los dedos se desplacen con mayor facilidad y sea todo más fácil y placentero para ambos.
Hazte esperar: Existen diferentes zonas erógenas que pueden estimularse antes del cunnilingus, como los lóbulos de las orejas, el cuello, el pecho, el ombligo y entre los muslos.
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Precauciones a tener en cuenta.
Recuerda que siempre es importante usar protección para evitar enfermedades de transmisión sexual, como la herpes bucal o el VPH (virus de papiloma humano). Se recomienda el uso de condones para poder evitar cualquier contagio.
Lo ideal es cortar el preservativo en ambas puntas y luego de forma vertical para formar una especie de barrera que servirá al momento de practicar el cunnilingus.
