“Y es que, en este mundo traidor, no hay verdad ni mentira: todo es según el cristal con que se mira” Refrán popular.
Mientras escribo estas líneas, continúa el debate en la Cámara de Diputados por la aprobación o no de la reforma energética o lo que se ha conocido en los últimos meses como Ley Bartlett.
Por ser una reforma de carácter constitucional y requerir con ello del voto de las dos terceras partes de los integrantes de la Cámara – 334 votos-, al parecer no logrará ser aprobada pues el bloque opositor integrado por PAN, PRI, PRD y MC, no la dejaran pasar.
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Pero no es mi colaboración de la semana para hablar si debe ser aprobada o no, aunque soy partidario del no; mas bien quiero reflexionar con ustedes mis dos y medio lectores, sobre lo que arrojó este ejercicio de debate cameral.
La semana anterior, con el resultado de la revocación del mandato comenté que uno de los resultados era que la oposición debía de seguir unida, pues a pesar del amplio rechazo al ejercicio de consulta el Gobierno y su partido movilizaron 15 millones de votos a su favor por lo que siguen siendo muy competitivos.
Hoy lo que deja este debate en la cámara confirma la necesidad de unidad del bloque opositor y lo que con esa unidad pueden hacer, ser una oposición real, un contrapeso claro para Andrés Manuel y sus discípulos.
Desde luego vendrán, según veo, más retos que pondrán en juego la unión, como la reforma electoral –no se me olvida que debo otra parte-,entre otras cosas, en las que seguramente cual liga de la justicia los seguiremos viendo unidos y haciendo una oposición clara y con propuestas, por lo menos en ese momento y para esos casos.
Y entonces ¿Dónde vendrá el problema?, el escoyo inmediato a saltar será el resultado electoral del 6 de junio pues todo apunta a que la oposición solo obtendrá el triunfo en Aguascalientes y Durango, 2 de las 6 entidades que están en juego; el segundo será como conformar esos gobiernos y enseguida como salir de esa coyuntura con madurez.
Otro bache será la escoger a la candidata o candidato de la coalición a la Presidencia de la República, dando por sentado que habrá coalición o frente, y como habrán de colocar sus juegos en el tablero de diputaciones, senadurías y cargos locales para crear equilibrios y sinergias necesarios para el triunfo.
CONCLUYENDO
- La candidatura a la Presidencia deberá de ser un ejercicio de la más alta política y visión de estado por parte del bloque opositor si lo logran estarán en la competencia, si se pierden, pues a estar como estamos, pocos más, pocos menos.
- Me preocupa, pues un contertulio, con asiento en primera fila en la visita a tierras potosinas de Alejandro Moreno (presidente nacional del PRI), de hace unas semanas, me comentó que el primer priista nacional, a voz en cuello dijo que va a buscar la candidatura a la Presidencia por la coalición.
- De ser así no auguro buenos resultados, podrán ir en coalición, pero no unidos a la elección pues el perfil de “Alito”, no es el perfil requerido. Que recuerden los priístas el tristísimo capitulo de la candidatura de Roberto Madrazo.
- Espero que prevalezca la razón de Estado, política de la buena, los ciudadanos eso están esperando, síntesis y praxis, no solo esta última, de eso nos dieron muestra en 2018.