Cosas de la Ciudad.- Rebrote de pandemia, inflación, crisis económica, inseguridad y violencia, principales retos para atender este nuevo año en SLP

Por: El Diablo Cojuelo

RETOS: Luego de un año complicado y de muchos cambios para San Luis Potosí, llega el 2022 con muchas esperanzas pues se tiene la confianza de que, de una u otra manera, las condiciones actuales mejoren de manera sustancial. Es cierto, San Luis Potosí y sus gobiernos, estatal y municipales, tienen retos grandes en varios rubros, retos que deberán atender de manera urgente, comenzando pro la pandemia de covid-19 que podría tener un rebrote importante en los primeros meses del año nuevo, la inflación y la crisis económica también generarán estragos y, si a eso se le suma la inseguridad y violencia que prevalecen en todo el estado, es claro que hay mucho trabajo por hacer y la gente demanda resultados con urgencia.

SUMA: El 2021 fue un año que representó la luz al final del túnel a pesar de todo el daño que sigue ocasionando la pandemia de coronavirus pues se comenzó con la campaña de vacunación contra el covid-19, una acción que, aunque tuvo que implementarse con muchas dudas y hasta desconfianza por parte de la ciudadanía, dio buenos resultados. Es cierto que no ha impedido que se sigan sumando defunciones, pero no se puede negar que el beneficio ha sido sustancial en muchos sentidos. La suma de casos positivos al término del 2021 es de 105 mil 886 casos acumulados y seis mil 966 muertes a causa del virus.

RECUPERACIÓN: En los últimos meses también fue posible comenzar a ver algunas acciones encaminadas a la recuperación económica que se había visto estancada y que provocó, incluso, la pérdida de una enorme cantidad de empleos en todos los sectores del mercado laboral. El turismo tuvo cifras positivas y la inversión volvió a ser un tema vigente. Sí, es cierto que la recuperación se está dando a cuenta gotas, que su paso es lento, pero está sentando las bases que podrían dar mejores resultados en los próximos meses, situación que representaría un beneficio considerable para la población en muchos sentidos.

COMPLICADO: Para muchos, el 2022 será un año de altas y bajas, de claroscuros, porque, aunque se tiene la esperanza de que el panorama mejorará, también se están dando ciertas circunstancias que podrían no ser del todo provechosas como lo es un fenómeno de inflación y alza generalizada de precios en productos y servicios. La canasta básica tendrá preciso más altos en varios de sus componentes y, a pesar de que las familias podrán enfrentar de mejor manera este tipo de sucesos, en términos generales no podrá hablarse de una ganancia, sino de, apenas, un ajuste en las condiciones adversas y positivas.

VIOLENTO: Los indicadores nacionales reiteran que San Luis Potosí es un estado violento, no igual que algunos vecinos, pero sí violento en comparación con años anteriores. La inseguridad y la violencia ha venido creciendo notablemente y en el 2021 se confirmó por enésima ocasión. En el año que terminó, durante el proceso electoral, la promesa de seguridad y combate a la criminalidad fue recurrente, casi 100 días después no se han visto resultados concretos o al menos no los suficientes como para devolverle la paz y la tranquilidad que tanto han estado pidiendo los potosinos y que, sin duda, tanta falta le hace al estado potosino.

CRISIS: Las familias potosinas no han sido las únicas que se han visto afectadas por la crisis económica, instituciones como la Cruz Roja y el Heroico Cuerpo de Bomberos Metropolitanos también operan en números rojos pues, como se recordará, muchos de sus ingresos provenían de las colectas que realizaban con el apoyo de la población, sin embargo, en 2020 y 2021 no se tuvo el éxito que se esperaba. Ambas instancias confían que en año nuevo les traiga un poco más de recursos para que, de esta manera, puedan continuar con su labor altruista y garantizar los servicios a la población.

EXPECTATIVAS: Sin duda, los cambios de gobierno abrieron muchas expectativas entre los potosinos, los triunfos que se registraron de manera indiscutible confirmaron también la necesidad de darle un giro a la forma de gobernar. Ni en el Estado ni en los municipios ha transcurrido el tiempo suficiente como para ver resultados notables de las políticas que se están implementando, pero el 2022 será un año en que se deberán ver estas acciones y beneficios que tendrán que impactar en una sociedad cansada y ávida de un gobierno eficiente.