La FGR informó que Juan Carlos ‘G’ fue detenido y vinculado a proceso por el delito de intervención ilegal de comunicaciones agravado.
Fue detenido y vinculado a proceso Juan Carlos “G”, empleado de la empresa Proyectos y Diseños VME, S.A. de C.V., del grupo empresarial KBH, vinculado al uso del software “Pegasus”, para espiar a una periodista, informó la Fiscalía General de la República (FGR).
El indiciado fue detenido en cumplimiento a una orden de aprehensión, a partir de las investigaciones realizadas por la Fiscalía Especializada en materia de Derechos Humanos (FEMDH), el pasado 1 de noviembre en la ciudad de Querétaro, Querétaro, por su vinculación en el delito de intervención ilegal de comunicaciones agravado.
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Juan Carlos “G” fue trasladado a la Ciudad de México para ser puesto a disposición de un Juez de Control, en el Centro de Justicia Penal Federal con sede en el Reclusorio Sur, en donde el Ministerio Público Federal de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), le imputó también delitos en contra de la libertad de expresión.
De acuerdo con la formulación de la acusación, el indiciado cometió delitos agravados, previstos y sancionados por el Código Penal Federal, con el objetivo de afectar, limitar y menoscabar la libertad de expresión de una periodista.
El Juez de Control del Reclusorio Sur vinculó a proceso a Juan Carlos “G” por ambos delitos, intervención ilegal de comunicaciones y contra la libertad de expresión, y ordenó la prisión preventiva justificada a petición del Ministerio Público Federal.
La autoridad argumentó el peligro de fuga por parte del indiciado, además de los riesgos que representa para la seguridad pública y de las personas involucradas en el proceso.
Además, el Juez de Control estableció un plazo de cuatro meses para que la FGR presente la investigación complementaria, en contra del detenido.
De acuerdo con las investigaciones el software Pegasus fue comprado bajo la administración del ex presidente Enrique Peña Nieto, para labores de vigilancia y escuchas telefónicas, para tareas de seguridad nacional, para dependencias dedicadas a esas tareas.
Inicialmente se utilizaría por la desaparecida Procuraduría General de la República (PGR), Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y el también desaparecido Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
Sin embargo, se descubrió que diversas empresas operadoras del malware utilizaron el sistema para escuchas ilegales, entre ellos contendientes políticos y periodistas.
En México, la empresa KBN TRACK fue la señalada de operar el software, mientras que NSO Grup, desarrollador de Pagasus, explicó que sus únicos clientes son gobiernos.
