Miguel Bosé: Memorias de una vida excepcional

El cantante lanzará el 10 de noviembre el libro El hijo del Capitán Trueno, en el que narra pasajes de su vida. Con autorización de Grupo Planeta, reproducimos un extracto del capítulo 6, Un paseo por Somosaguas.

A partir de mis siete años, casi cada fin de semana de buen tiempo, ensillábamos caballos y dábamos clases en el picadero de la parcela de al lado, la que más tarde habitarían los Sainz, con el profesor de equitación Santiago Alba, que, además de entrenador, se encargaba del cuidado de los caballos del tío Manolo Prado, los que montábamos, y de mi appaloosa, Tiberio.

Ponerle ese nombre fue toda una conquista. Cuando mi padre me preguntó quién era Tiberio, haciendo un esfuerzo inmenso para superar su imponencia y mi timidez, le conté que Tiberio era el segundo emperador de Roma de la dinastía Julio-Claudia, que reformó las leyes militares de su tiempo, bla, bla, bla…

Y según iba relatándole la historia, i padre, pasmado y sin poder quitarme los ojos de encima, llegando al momento de contarle lo hermosas que eran las villas que construyó en la isla de Capri, a la que a mamá tanto le gustaba ir, escorando la cabeza me interrumpió con un: “Ya basta, mico. ¿De dónde sacas tú todo ese conocimiento?”, y le respondí que de los libros.

—Me han contado que lees mucho, ¿no es así?
—Sí, papá, me gusta mucho.
—¿Y de dónde vienen todos esos libros?… De la librería del salón, ¿no?… ¿Sabes que está prohibido entrar en el salón?… ¿Sabes que leer tanto es malo?… ¿No te gusta más montar a caballo?
—También… pero un poco menos.
—¿Y cazar?… ¿Por qué no te gusta cazar?… Si no te gusta cazar, ni pescar, ni nada de esas cosas… dime tú cuándo voy a estar yo con mi hijo… ¡Tiene que gustarte, Miguelón!… Tienes que hacerme el favor de que te guste o voy a empezar a pensar que no eres mi hijo… porque de mí… por ahora, que yo sepa… no has sacado nada… Mira, Miguelón… los hombres tienen que hacer cosas de hombres entre hombres… como las mujeres hacen las suyas entre ellas, ¿lo entiendes?… Montar a caballo, ir de cacería, pescar y más adelante otras que ya te iré contando… Estoy deseando que cumplas doce años para que te fumes el primer cigarro, ¡coño!…

El año que viene… si te entrenas con el rifle bien pero que bien… te llevo de safari un mes entero, tú y yo solos, a la selva de Uganda o a Mozambique… ¿Te gusta la idea?… ¡Ya verás qué bien nos lo vamos a pasar pegando tiros y cazando animales!… ¡Y bañándonos en los ríos llenos de cocodrilos y de hipopótamos!… Ahí sí, que te guste o no… voy a conseguir hacer de ti un hombre, ¡pero vamos!… como que soy tu padre.