Científicos descubren causas del avance del Alzheimer en el cerebro

Los científicos encontraron que proteínas tóxicas que se acumulan en el cerebro participan en el progreso de la enfermedad de Alzheimer.

Científicos descubrieron del progreso de la enfermedad de Alzheimer en el cerebro, un avance muy importante en el proceso para encontrar un tratamiento que logre detener o alentar el deterioro cerebral por la enfermedad.

De acuerdo con la información, los grupos de proteínas tóxicas que se cree que son responsables del deterioro cognitivo asociado con la enfermedad de Alzheimer llegan tempranamente a diferentes regiones del cerebro y luego se acumulan durante décadas.

Este avance fue publicado en la revista científica Science Advances este viernes.

La investigación es la primera en utilizar datos humanos para cuantificar la velocidad de los procesos moleculares de esa enfermedad neurodegenerativa y, eventualmente, podría tener importantes implicaciones para diseñar tratamientos.

También altera la teoría de que se forman grumos en un lugar del cerebro que desencadenan una reacción en cadena en otras áreas; un patrón que se observa en los ratones. Esa propagación puede ocurrir, pero no es el principal impulsor, según los investigadores.

Se unieron dos cosas que realmente hicieron posible este trabajo», dijo a la AFP Georg Meisl, químico de la Universidad de Cambridge y autor principal del artículo.

Una, fueron datos muy detallados obtenidos por PET (Tomografía por Emisión de Positrones) y varios conjuntos de datos que hemos reunido, y la otra son modelos matemáticos que hemos desarrollado en los últimos diez años».

Los investigadores utilizaron cerca de 400 muestras cerebrales post mortem de enfermos de Alzheimer, así como 100 PET de personas que viven con la enfermedad para rastrear la acumulacion de tau, una de las dos proteínas clave implicadas en la afección.

En la enfermedad de Alzheimer, tau y otra proteína llamada beta amiloide se acumulan en nudos y placas -conocidos ambos como agregados- que matan las células cerebrales y encogen el cerebro.

Esto, a su vez, se traduce en pérdida de memoria, cambios de personalidad e incapacidad para realizar funciones cotidianas. Se estima que 44 millones de personas padecen la enfermedad en todo el mundo.

Crecimiento exponencial

Investigaciones anteriores, realizadas principalmente en animales, sugerían que los agregados se forman en una región y luego se diseminan por todo el cerebro, de manera muy similar a como se extiende el cáncer.

El nuevo estudio señala que, si bien esa propagación puede ocurrir, de hecho, no es el principal motor del avance de la enfermedad.