Esa reciente victoria ha colocado a las fuerzas yemeníes dentro del alcance de la capital provincial de Marib
Fuerzas yemeníes liberan otra capital de distrito en la estratégica provincia de Marib del control de la coalición saudí llegando a un paso de la capital provincial.
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Fuentes locales yemeníes y varios medios han informado este martes de la liberación de la ciudad de Al-Yadid, capital del distrito de Al-Yuba, tras los feroces enfrentamientos que han causado la muerte de decenas de mercenarios liderados por Arabia Saudí y han obligando a otros cientos a rendirse.
Las fuerzas del Ejército y los comités populares de Yemen tardaron 48 horas en recuperar el control de la ciudad, incluido su centro, los edificios gubernamentales y los campamentos de mercenarios, han notificado las fuentes.
Según la cadena iraní de lengua árabe Al-Alam, esa reciente victoria ha colocado a las fuerzas yemeníes dentro del alcance de la capital provincial de Marib (centro-oeste), que lleva el mismo nombre que la provincia misma.
“Las fuerzas yemeníes están a solo un paso de la ciudad de Marib. Han reforzado el control sobre los mercenarios invasores y han tomado la ciudad bajo fuego desde tres direcciones”, ha indicado el reportero de Al-Alam. Marib, que se encuentra en medio de muchas otras provincias yemeníes, se ha convertido en el centro de las operaciones del Ejército yemení desde el año pasado, y su reconquista, hacia la que se han logrado muchos avances hasta ahora, allana el camino para nuevas victorias militares de las fuerzas yemeníes.
La reconquista de esta provincia por parte de las fuerzas yemeníes asestará un duro golpe a la coalición saudí del que no podrá recuperarse, ya que se erige tanto como el último bastión norteño del gobierno del expresidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi (respaldado por Arabia Saudí) desde el que se puede recuperar la capital de Yemen, Saná, y como un muro para bloquear los avances del Ejército yemení y los combatientes del movimiento popular Ansarolá hacia las provincias de Hadramawt y Shabwa, ricas en petróleo.
Arabia Saudí y algunos de sus aliados han lanzado una guerra devastadora contra Yemen desde 2015 con el objetivo de restaurar en el poder al expresidente Mansur Hadi y aplastar a Ansarolá, objetivo que el enemigo no ha podido materializar, pese al apoyo integral que recibe de parte del Occidente.
